Ayer por la mañana, previo a conocerse que el distrito retrocedía a fase 2, propietarios de gimnasios de nuestra ciudad se presentaron en la Municipalidad para expresar su desacuerdo con el decreto lanzado el pasado martes por el municipio, que, entre otras disposiciones, definió el cierre de los establecimientos por quince días.
Ante esa medida, desde el sector -unos 40 representantes- concurrieron al municipio para tener explicaciones de las autoridades y mostrar su descontento por la normativa. En ese marco, fueron recibidos por el secretario de Desarrollo Económico Matías Fhurer y por el director de Deportes Guillermo Orsili.
Tras la reunión con los funcionarios, Eduardo Forte y Federico Rodríguez, voceros del grupo de propietarios de gimnasios, dialogaron con este diario y expusieron su postura sobre el tema. “La idea de nuestra presencia en el municipio es que nos fundamenten el decreto. Queríamos que nos expliquen los motivos de la decisión, ya que para nosotros nos parece algo incoherente”, indicó.
“Entendemos que el sistema de salud está colapsado y tenemos que apoyarlo. Si hay que cerrar los gimnasios por quince días, pero creemos que si otras actividades siguen abiertas, el decreto no iba a tener impacto sobre el sistema de salud”, sostuvo.
“Nosotros queremos que todo el mundo trabaje. No estamos en contra de ningún rubro. Nos dijeron que las fases están hechas desde la Provincia. Particularmente, y es mi opinión, el que hizo las fases se está equivocando. Los gimnasios no son un foco de contagio. Al contrario. Son agentes de salud”, mencionó Forte.
Por su parte, Rodríguez manifestó que la semana próxima volverán a reunirse con las autoridades municipales con la idea de elevar una nota a la Provincia. “La Municipalidad no tiene potestad en este asunto y no puede resolver que los gimnasios sean declarados como rubro esencial o como parte del sistema de salud”, sostuvo.
