“La medida de fuerza comienza a demostrar sus resultados de rechazo a la medida que adoptó el Gobierno. No hay movimiento de hacienda en el interior y en el Mercado de Liniers al tener la adhesión de los consignatarios al paro, hay un freno a la actividad en ese lugar, como sí también se están suspendiendo los remates que están programados”, dijo anoche Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), una de las entidades que conforman la Mesa de Enlace a 48 horas del comienzo del cese de comercialización de hacienda en rechazo de la suspensión de las exportaciones de carne por 30 días decretado por el Gobierno.
Con el paso de las horas la medida de fuerza que lleva adelante el campo tiene cada vez más voces a favor y un pedidos de las bases para endurecer la postura y también suspender la venta de granos como solidaridad con el sector ganadero.
En este sentido, todavía no hay señales desde la Mesa de Enlace sobre cómo seguirán las acciones.
En tanto, hay decisión de otros sectores de la producción, como porcinos y economías regionales, de sumarse a la protesta.
En tanto, hay decisión de otros sectores de la producción, como porcinos y economías regionales, de sumarse a la protesta.
Por otra parte, el presidente de CRA confirmó que por ahora no hubo contactos con el Gobierno y también que no hay programadas asambleas y movilizaciones en el interior.
Según publicó el portal Infobae, por estas horas el Gobierno iniciará una negociación con la cadena de ganados y carnes. El interlocutor oficial será el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quien ante un reclamo que realizó el Consejo Agroindustrial Argentino recibirá a dirigentes de la Mesa de las Carnes, uno de los sectores que conforma dicho espacio, encabezados por el Coordinador de la misma, Dardo Chiesa.
Entre los puntos a debatir para destrabar el conflicto, se encuentran la comercialización de carne a precios accesibles en el mercado interno, donde la idea que tiene el Gobierno es intervenir en el Mercado de Liniers para retirar a la exportación de dicho ámbito y evitar la suba de los precios en el mercado interno, como así también la puesta en marcha de más controles para evitar la subfacturación de exportaciones.
Desde el sector privado habrá un pedido para bajar la presión impositiva y que se eliminen las restricciones para comercializar al exterior.