El concejal de Juntos por Dorrego, Hugo Segurola, escribió en su facebook un extenso comentario relacionado a las elecciones y los resultados obtenidos por su partido, que lo dejó lejos de renovar su banca.
“Esta vez hice caso a uno más, de los acertados consejos de alguien muy especial, que me dijo: No te dejes guiar por la ansiedad, mejor descansá y tomate tiempo para escribir.”
“Tal como lo hice después de cada derrota, hoy vuelvo a hacerlo, a expresarme desde las palabras, por dos razones: para no rehuir de mis deberes de conductor, también, para agradecer. Asumo en exclusividad absoluta la responsabilidad de esta derrota, aunque el dolor lacerante siga vivo en cada uno de los que pusieron el hombro y el esfuerzo en esta campaña, no hay otro responsable de la misma que yo. No es un acto demagógico, es un ejercicio de la realidad que quienes asumimos roles de liderazgo debemos no solo interpretar, sino también asumir”, señala el periodista en el inicio de la nota.
Seguidamente describe una extensa lista de gracias, entre las cuales sobresalen alguna tales como “a los Judas que descubrimos ayer, que en la cara nos dijeron que se dejaban comprar por cuatrocientos pesos y que esta vez no nos iban a acompañar. Serán los mismos que volverán a una puerta que a partir de diciembre ya no estará abierta?”.
“A los que creyeron en el mensaje de los sueños, a los que no se dejaron vencer por la tentación, la dádiva, la promesa o la amenaza de perder derechos”.
“A los que creyeron en el mensaje de los sueños, a los que no se dejaron vencer por la tentación, la dádiva, la promesa o la amenaza de perder derechos”.
“A los que se marcharon por su propia voluntad o porque no se sintieron contemplados, a los que saltaron el charco o nos clavaron el cuchillo de la ingratitud y de la deslealtad. Nos permitió conocer a muchos lobos vestidos con piel de cordero”.
“A los que todavía me piden un esfuerzo más, a los más jóvenes que me han declarado líder motivacional”.
“A los que me dijeron: ¡Basta de seguir insistiendo con cambiar las cosas!, ocúpate de lo importante, de tus afectos, de tus cosas, de tu trabajo, de otros sueños”.
Y también pide perdón “a mis hijos y afectos más cercanos por el llanto, por los dolores de cabeza, por mis ausencias, porque pagaron con la afrenta o la burla por mis yerros, caprichos y convicciones”.
Y también pide perdón “a mis hijos y afectos más cercanos por el llanto, por los dolores de cabeza, por mis ausencias, porque pagaron con la afrenta o la burla por mis yerros, caprichos y convicciones”.
Además de su compromiso de trabajo hasta diciembre, sostiene que “tengo en claro que la tarea deliberativa no está en la agenda de la gran mayoría de los vecinos, que poco saben o les interesa el trabajo de sus concejales. Que son críticos por naturaleza y quizás con razones que los avalen, pero desinformados y lo peor, desinteresados por aquellos a los que le entregan un mandato. Pero que a fuerza de ser sincero (en bien de la institucionalidad me preocupa) no consideran, no valoran ni les interesa la acción de sus representantes”.