El juez federal Sebastián Casanello procesó al detenido empresario Lázaro Báez y a otra veintena de imputados por integrar una banda que lavó dinero entre los años 2010 y 2013. El procesamiento incluye a los cuatro hijos de Báez, por ser los beneficiarios de un entramado societario que controlaba cuentas en Suiza por las que se habrían canalizado unos 60 millones de dólares.
El juez tomó esta decisión tras un análisis integral sobre más de dos docenas de hechos de lavado de dinero que fueron denunciados por distintos actores a lo largo de la investigación.
La resolución expone cómo durante los últimos meses del año 2010, Báez comenzó a gestar, a través de Leonardo Fariña, un esquema de lavado de activos que incluyó el envío al exterior sumas millonarias, a través de financieras como SGI, más conocida como “La Rosadita”. Según asegura Casanello en su fallo, esa plata se origina en el extendido esquema de corrupción K investigado por Julián Ercolini, tras la denuncia por asociación ilícita de Elisa Carrió contra Néstor y Cristina Kirchner, Julio de Vido y Lázaro Báez, entre otros, en 2008. (Télam)