Señora directora:
Hace muy poquito murió Ethel Gómez. Maestra, gremialista, luchadora.
Uno podrá o no estar de acuerdo con sus ideas, podrá pertenecer al sindicato que ella ayudó a formar en Tres Arroyos o no, lo que nadie podrá negar es que fue una mujer comprometida con sus ideales, a los que defendió a capa y espada.
Compartí muchas charlas con ella en épocas en las que era secretaria general del SUTEBA en nuestro distrito. Coincidíamos muchas veces y discutíamos bastante también. Pero siempre dentro del respeto y el afecto.
Muchos años después de haberse jubilado como inspectora, Ethel seguía batallando dentro del gremio, cuando la mayoría de quienes nos jubilamos tratamos de alejarnos de horarios, obligaciones, responsabilidades. Ella cumplía horarios, se subía al micro para ir a reuniones en La Plata o Buenos Aires, militaba, ésa es la verdad.
Ojalá las generaciones jóvenes de docentes puedan tomarse unos minutos para recordarla y reconocer que su lucha, junto con la de tantos otros, es la que ha permitido que tuviéramos muchos de los logros de los que gozamos, logros que quizás ahora naturalizamos, pero que en su momento significaron luchas y hasta riesgos.
Ethel es parte de nuestra historia docente. Le agradezco profundamente el compromiso de tantos años con nuestra educación, con las escuelas, con los docentes.
Alicia Hurtado