Con tan sólo dos años, este pequeño oriundo de Río Gallegos le pidió a su madre que lo ayude a cumplir su sueño, ser un “granadero soldado”. El resultado: el pequeño participó de la ceremonia de arriado de la bandera en Plaza de Mayo junto con los integrantes del Regimiento. Vestido igual que quienes admira, el niño realizó toda la caminata deslumbrando a los turistas que estaban en el lugar y logrando incluso que sus “colegas” se realicen fotos junto a él.
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Mónica, la mamá Mateo, contó a Radio Mitre que hace un tiempo “vinimos derivados desde Río Gallegos a Buenos Aires, llegamos un 17 de agosto”. Ese mismo día, la familia fue a la Plaza San Martín y estuvieron presentes en el acto que se realizaba por el aniversario del fallecimiento del libertador de América.
Desde ese momento, “Mateo no me pidió traje de Spider-Man, sino de Granadero, para nosotros es un orgullo. Ahora lleva puesto el traje desde que se levanta hasta que se acuesta”.
El hermano mayor de Mateo se llama Maximiliano, y debido a una malformación, el pequeño fue enviado a Buenos Aires para continuar con su tratamiento. Mónica asegura que Maximiliano “tenía riesgo de muerte, al principio no caminaba, no hablaba. Tuvimos que venir desde Río Gallegos dejando toda la familia. El año pasado estuvimos todo el año y ahora vinimos en agosto para una nueva cirugía”.
Lejos de quejarse, Mónica aseguró que para ella el mejor valor que puede darles a sus hijos es que “amen la patria y respeten los símbolos patrios”, algo que se nota en la pasión que pone Mateo al intentar emular a los Granaderos. (Mitre.com)