La escasa presión o directamente la falta de agua en diversos puntos de Claromecó fue una situación que generó preocupación y disconformidad entre vecinos y turistas de la localidad.
Por este motivo, la Cooperativa Eléctrica ha recibido numerosos reclamos por parte de los usuarios. Desde la entidad pidieron el uso racional del recurso, al considerar, fundamentalmente, que no se vislumbra una pronta solución a un tema de vieja data.
En diálogo con este diario, desde la entidad reconocieron la existencia de una problemática que se reitera verano tras verano, sobre todo, durante los fines de semana en los que el caudal de turistas asciende.
Ante este escenario, sostuvieron que es necesaria la realización de nuevas perforaciones para lograr satisfacer la demanda, que por estos tiempos duplica la capacidad de oferta disponible. Esa, de acuerdo a informado desde la cooperativa, es una obra que se encuentra dentro del presupuesto 2017 del Servicio Provincial de Agua Potable y Saneamiento Rural (SPAR), aunque todavía se desconocen las fechas para el comienzo de la supuesta ejecución.
Razones
En horas “pico” el consumo de agua supera en más del doble lo que puede abastecer el sistema hídrico de Claromecó, según informaron desde la cooperativa. Con este panorama, pidieron que el vital recurso hídrico sea utilizado en forma racional y que, en determinados momentos del día, principalmente, se evite el derroche de agua.
Carlos Bancur, responsable del Servicio de Agua de la entidad, y César Fuente, encargado de la Oficina Técnica y de Energía de la institución, hicieron referencia a los motivos por los cuales se genera la escasez del recurso en determinados pasajes del verano. En ese marco, pusieron de relieve datos concretos que marcaron la dimensión de la situación dada.
“Hemos tenido muchos reclamos. El problema que tuvimos es por la gran demanda que hay. El servicio tiene 22 años y genera una producción de 100 mil litros/hora. La demanda es el doble, y aumenta en las horas ‘pico’”, señaló Bancur en primer término.
Fuente, en tanto, sostuvo que el servicio, originalmente, fue planificado para proveer de agua a 2000 usuarios. Sin embargo, en la actualidad, se le brinda la prestación a 3500.
Con el escenario planteado, aportó un dato que se registró el último fin de semana. “Tanto sábado como domingo, a las 21.34 horas, la demanda fue de 167 metros cúbicos/hora y la producción es de 89 metros cúbicos/hora”, graficó.
Ante lo mencionado, Fuente afirmó que “la demanda duplica la producción. Por ende, comienza a bajar la presión de la red y dependiendo de la ubicación del inmueble, al igual que de la altura de los tanques, hay usuarios que se quedan sin agua”.
Bancur mencionó que el contexto de sequía por la falta de precipitaciones constituye otro de los motivos que genera la reducida presión o, en ciertos casos, la falta del vital recurso. “Eso hace que la gente se ponga a regar las calles. También lava sus vehículos y las lanchas”, indicó.
Uso irracional
Posteriormente, el responsable de la Oficina Técnica y de Energía aseguró: “Estamos convencidos de que hay un uso irracional del agua potable, que es un recurso no renovable que en Claromecó, como en pocos lugares de la provincia de Buenos Aires, es de excelente calidad”, indicó.
Y agregó: “Es un despropósito lavar lachas, cuatriciclos y camionetas con agua potable, al igual que llenar piletas. Es una lástima”.
Para cambiar el panorama, es necesario, según dijo Fuente, incrementar la producción de agua. “Eso se consigue haciendo más perforaciones. Además, habría que aumentar la capacidad de reserva, en este caso podría ser la construcción de una nueva cisterna”, sostuvo.
“Todo depende de cómo se dé el clima. Si el día es muy bueno para la playa, la gente cuando llega a su casa lo primero que hace es bañarse o lava sus vehículos. Eso se multiplica y llega un momento en que el sistema colapsa”, remarcó.
Desde la Cooperativa informaron que el servicio de agua se normalizó en el mediodía del pasado martes. “Es justo el reclamo que han hecho los usuarios. El agua es un servicio esencial y lo entendemos perfectamente. Lo que pasa es que no podemos hacer nada porque no tenemos más producción. En lo inmediato no hay solución”, aseguraron.
Por último, recomendaron el uso racional del agua y, “el que tenga la posibilidad de aumentar la reserva o instalar una cisterna, que lo haga”.