El grupo folclórico Destino San Javier está integrado por Franco Favini, y Bruno y Paolo Ragone. Son los hijos de Pedro Favini y José Ragone, artífices del legendario Trío San Javier. Pasaron muchos años de la presentación en Tres Arroyos para la Fiesta del Trigo del grupo musical que hoy hereda a sus hijos para seguir con el legado que dejaron a través de sus canciones. El escenario mayor -por aquel entonces erguido a un costado del palacio municipal- cantó con ellos a la vida, a la familia, al nacimiento al amor. Destino San Javier recupera el bien de familia y se presenta en nuestra ciudad para ofrecer el corazón y mantener viva esa llama que los hace elegir estar juntos.
Franco Favini le cuenta a LA VOZ DEL PUEBLO cómo nace el grupo y el recorrido que hicieron antes de descubrir su destino.
“La unión que tenemos es familiar, Bruno y Pablo son hermanos y primos hermanos míos. Pero más allá de eso, toda la vida estuvimos unidos a través de la música y de distintas actividades. Ellos en principio cantaban como dúo, después buscaron su camino que fue de búsqueda permanente. Hoy nos sorprendemos porque el propio destino nos termina marcando que teníamos que estar juntos. Uno de los tantos motivos del nombre es ése, era algo que teníamos adelante y no nos dábamos cuenta. Tal vez nunca lo habíamos visto, hoy en día nos damos cuenta de lo que nos estaba pasando”.
Cuando eran chicos, los tres cantautores formaban parte de las giras en las que se presentaban sus padres. Franco los acompañó por mucho tiempo tocando el teclado para el Trío. La música los encontró siempre, no tuvieron que buscarla, estaba ahí, desde la cuna.
Juntos
Franco se dedicaba a la producción musical. En el 2015 participó con su hijo en un programa de Telefe que se llamaba “Laten corazones” del que expresa: “Fue un gran avance personal como para poder enfrentar cámaras, cada uno tenía algo en su camino, Paolo estaba en el exterior cantando y actuando, Bruno estaba trabajando en el programa Laten Corazones como coach y yo como participante”.
Hasta ese momento sus carreras iban por diferentes carriles, sin embargo un hecho modificó esto. “A través de ese camino que se fue uniendo nos juntamos y decidimos que lo que hacíamos en casa toda la vida teníamos que llevarlo al escenario. Y el público lo tomó de una forma fantástica, tan natural y orgánica que nos sorprendió, pero entendemos que hacemos algo genuino, lo que marcó la diferencia”, cuenta.
“Arrancamos de alguna forma con la partida de mi viejo, fue uno de los puntos iniciales. Antes el Trío venía cantando, haciendo su carrera. Cuando mi papá falleció no quisimos dejar huérfanas tantas canciones y tantas cosas y empezamos como este homenaje permanente, porque sentimos que mi viejo está arriba del escenario en cada show que hacemos, nos ayuda mucho su espíritu que está presente”.
El escenario, el repertorio
Franco cuenta lo que sienten cada vez que asumen la responsabilidad de subir al escenario para mantener viva la chispa del amor familiar por la música, por lo que une a las personas alrededor de una mesa, por los vínculos que acercan y trascienden cualquier otro sentimiento: “Nos sentimos muy homenajeados porque la gente traslada todo el cariño que le tenían a ellos -el Trío San Javier- y tanto mis primos como yo sentimos ese cariño con mucha responsabilidad, es difícil de explicar, porque el hecho que te quieran por lo que hicieron ellos es una carga de responsabilidad, pero es algo muy lindo. Es una mezcla sensaciones encontradas, pero es algo que suma cariño”.
El repertorio que eligen y que van a compartir con el público tresarroyense es conocido e invitará al canto y la identificación, “todas las canciones que hacemos son compuestas por nuestros padres, casi todas de mi viejo. Alguna que otra como Calle angosta que en realidad la cantamos porque antes del Trío San Javier -tanto mi papá, Pedro Favini como mi tío Pepe Ravone- estaban en Los Cinco del Norte y fueron los primeros que grabaron esa canción que recibieron directamente de mano del autor, por eso la interpretamos para hacer cantar al público que la conoce bien”.
Franco analiza el estilo y la impronta que le dieron a Destino San Javier: “Le dimos una vueltita de tuerca al estilo porque sentimos que el público se ha renovado, no somos tan tradicionalistas más allá que el Trío tampoco lo era, le damos una impronta más romántica, optimizando ese romanticismo de las edades nuevas… Le ponemos nuestra impronta”.
Proyectos
El integrante de Destino San Javier cuenta que “recorrimos todo el país dando vueltas con mucha aceptación, lo que nos pone muy felices, en festivales que se televisan y eso nos tiene muy conectados con el público. Para este año el principal proyecto es dar a conocer y hacer caminar a nuestro primer hijo, nuestro primer disco que tenemos hace muy poquito tiempo. Queremos que camine y sea lo más aceptado posible, que tiene como primer corte Te vengo a preguntar”.
Y agrega: “Ahora estamos con el segundo corte que es la canción Por algo será, que es de mi viejo junto a Miguel Angel Robles. Esa canción no la grabó nunca el Trío San Javier, pero como Se me hace agüita la boca, o El duende del bandoneón, Te vengo a preguntar son canciones compuestas por mi papá que nunca grabó el Trío y sí otros artistas, pero las interpretamos porque son parte de nuestro destino”.
Tanto franco como Bruno y Paolo tienen una carrera como autores “más o menos prolífica”, de hecho una de las canciones inéditas es de Bruno Ragone y otra está compuesta por Mariano Bullrich, hijo del Paz Martínez que integró el Trío San Javier en su conformación inicial y “es parte de esta gran familia”.
Destino San Javier tiene una meta que quieren mostrar en el escenario: “Exaltar el sentido de familiaridad algunas veces menospreciado, pero queremos volver a los valores de enfatizar la familia, lo lindo, lo cotidiano. Por ahí estamos sumergidos en cosas negativas y cantarle al amor u otros sentidos y valores es válido, cantarle a la familia y a las cosas cotidianas como lo que cantó el Trío”.
Y completó: “Para nosotros es fundamental continuar esa línea y es lo que el público disfruta. Cuando hay conexión con la gente mis primos empiezan a cantar de sorpresa Franco, mi niño, que me compuso mi papá cuando nací. Interpretarla y escuchar hasta el parecido de mi voz con la de él conmueve mucho. Lo mismo ocurre cuando interpretamos 15 primaveras o Será varón, son canciones muy lindas, un quiebre en el show y es donde el público se relaja, el punto de inflexión”.
Franco quiere hablarle a Tres Arroyos para dejar el mensaje que mueve sus sentidos. “Será un honor participar con mucha alegría y disfrutar de este homenaje en su ciudad y ver este destino arriba del escenario”.
Tres intérpretes, cantantes, autores con impronta, con la marca en el orillo, las astillas de tan buena madera, Destino San Javier… Lo mejor de los mejores, lo más cálido y sensible de las canciones que hicieron y hacen que la gente disfrute, se conmueva e identifique.