Señora directora:
Hace varios días que venimos recibiendo información, y reclamos, respecto de la posible presencia de una ONG en escuelas desarrollando un tema en apariencia absolutamente inocente, pero que no lo es tanto si uno sólo raspa un poquito en la superficie.
Aparentemente, la oportuna intervención de una docente, que puso sobre aviso a las inspectoras, abortó, por ahora, esos intentos de intromisión, que están absolutamente normados desde Dirección de Escuelas, o sea, si no se respetan las pautas es o por ignorancia o por desidia, cosas inaceptables en funcionarios.
Pero esta ONG, llamada Activistas por La Paz, con relaciones con una controvertida figura que cualquiera puede googlear, William Soto, ya ha tenido incursiones en las escuelas, de la mano de Ricardo D’Annunzio, funcionario municipal. En mayo de 2016, con foto en los medios, gente de esta organización anunciaba, junto con el mencionado funcionario, charlas en escuelas sobre la problemática del agua. Un mes después, los mismos medios informaban que 2134 alumnos de escuelas primarias habían recibido estas charlas. Es en este año también que aparecieron noticias sobre la participación de esos activistas y el ecocanje promovido por la municipalidad local.
Me cuentan algunos amigos, más avisados que yo, que la iglesia de la llamada Gavilla Mecida, que estaría relacionada con los miembros de la ONG, es una edificación muy humilde que, extrañamente, tiene en su terreno posterior una costosa antena parabólica. Claro que esto puede ser absolutamente normal y legal, solo resulta llamativo.
Lo importante acá es que los funcionarios no invadan áreas que no les correspondan y que las autoridades educativas no se dejen invadir. Ningún directivo de escuela puede permitir la entrada al establecimiento de nadie cuya visita no cuente con autorización expresa de las autoridades educativas. Y, por encima de todo, no dejarnos encandilar por los nombres rimbombantes de algunas organizaciones que esconden segundas intenciones en su aparentemente inocente y desinteresado obrar.