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Reducen a un cuidador y roban en el campo de la familia Fjellerup

Tres sujetos encapuchados redujeron al cuidador de un campo de la familia Fjellerup, en Lin Calel, y le sustrajeron dinero en efectivo y un auto del trabajador. El hecho ocurrió en las últimas horas de la tarde del martes, cuando Héctor Luis Zárate, quien se desempeña como cuidador del establecimiento rural “La Mojada”, ubicado en el Cuartel XVII del distrito de Tres Arroyos, fue reducido por los delincuentes quienes, según informó posteriormente a La Voz del Pueblo el propio Leandro Fjellerup, lo esperaban a él para robarle.

Sin embargo, como el padre de Maxi Fjellerup, el reconocido jugador tresarroyense de Bahía Basket, aceptó una invitación para ver el partido de su hijo con un amigo (Bahía Basket le ganó a Echagüe en Paraná 91-75), llegó más tarde al campo y los ladrones ya se habían ido.

“El robo fue a las 20.30, después que mi cuidador llegó de comprar unas cosas en Lin Calel. A él (por el cuidador) lo encontré a la madrugada, a la 1.20 más o menos (de ayer), después que me quedé mirando el partido de básquet de mi hijo Maxi. Así que no llegué más temprano de casualidad. Los ladrones se fueron de mi casa aproximadamente a las doce y media de la noche”, recordó el productor agropecuario en diálogo con La Voz del Pueblo.

El auto, un vehículo marca Peugeot 306, dominio CQP-259, lo encontraron ayer por la mañana en Moreno al 4000,en la zona rural perteneciente al Cuartel II, y los delincuentes se llevaron 4500 pesos y un reloj de Leandro Fjellerup.

“A mí justo me invitó Federico Arias a ver el partido de básquet por internet, que en el campo no tengo, y acepté. Sino no llegaba a esa hora”, agregó.

 

“Me esperaban a mí”

Tal como explicó el propio Fjellerup, los delincuentes le provocaron un importante desorden en su casa, “me dieron vuelta todo, me rompieron muchas cosas y se llevaron un reloj que me habían regalado mis hijos para los 40 años. Le robaron más cosas a mi cuidador que a mí”, dijo, antes de comentar el verdadero objetivo de los delincuentes, “eran tres delincuentes y decían que me estaban esperando a mí”.

Después de reconocer que nunca había tenido una experiencia de este tipo (“jamás había sufrido un robo en el campo, nunca, es la primera vez”), como así también sus vecinos (“a ellos jamás les había pasado algo así”), Fjellerup dijo que confía en el trabajo de la policía para que estos hechos no se repitan, “esto no es lindo, pero uno tiene que seguir peleandola y confiar en que la policía va a poder localizar a los delincuentes”.

Al respecto, el productor agropecuario valoró el trabajo de los miembros del Comando de Prevención Rural, “tengo que rescatar que, con los pocos medios que tiene la policía, conmigo se re portaron. La verdad es que espectacular como se manejaron todos en un rato”, indicó al referirse a las tareas realizadas por el equipo a cargo del oficial principal Walter Santolini, jefe del CPR de Tres Arroyos, quien junto al personal de Policía Científica, que peritó el vehículo encontrado en la sección quintas, realizaron las distintas actuaciones judiciales en el marco de una causa caratulada “robo agravado”, con intervención de la Fiscalía en turno.

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