Juan Pablo Urra es una de esas personalidades con una vida nutrida de hechos significativos. Por empezar, su nombre fue elegido en honor al Papa Juan Pablo II, que en el año de su natalicio (1982) visitó nuestro país, y más específicamente visitó la ciudad donde él nacería (Bahía Blanca); fue subcampeón mundial de bochas, repetido monarca nacional, Olimpia de plata y actualmente, con sólo 34 años, es uno de los técnicos de la selecciones nacionales.
Tres Arroyos disfrutó de su presencia durante el desarrollo del Campeonato Argentino Sub-23, donde la ciudad no sólo se conmovió con la competencia, sino que también festejó la conquista de Martín Aristain. Como jugador y entrenador de escuelitas bahienses, Urra visitó muchas veces Tres Arroyos, pero esta vez lo hizo en una función distinta, especial.
“Es así, recuerdo haber venido con una gran escuela de chicos menores de 12 años que teníamos en Bahía; lo hicimos en las canchas de Quilmes y Unión. Y como jugador claro que vine desde que era preinfantil. Pero esto es algo totalmente diferente, tengo que mirar las cosas de otra manera para seleccionar chicos y elevar un informe para Buenos Aires y la Confederación Argentina. Feliz de la vida por esta designación que recae sobre una persona de 34 años que aún se siente vigente como jugador y que puede tener otra mentalidad con los chicos”, comenzó diciendo con alegría el bahiense.
Urra admite que esta doble función “potencia todo. Yo tengo experiencia de técnicos que me han perjudicado y de otros que me he beneficiado notablemente. Me refiero a lo que no hay que hacer con un chico y de lo que sí hay que rescatar en cuanto a la sabiduría de los que me han enseñado tanto. Ahora es el momento de volcarlo en el trabajo; creo que tengo experiencia para hacerlo desde una mentalidad joven y con nuevos proyectos”, asegura Urra.
Pero esto de las bochas es una cuestión que lo acompañará durante toda su vida. “Sin dudas, creo que mi vida será siempre así. Pero este no debe ser un mensaje que confunda a la gente; porque ahora estamos apuntándole con todo a los chicos. En este Campeonato he visto un gran nivel; que si bien sólo tuvo 8 delegaciones, tranquilamente se puede hacer una selección. Hubo chicos de 13 y 14 años, fue fantástico todo. Esto es a lo que le apuntamos nosotros, a reunir a los chicos en un lugar y transmitirle nuestras ideas y exigencias, que sean buenas personas, buenos compañeros. Si juegan bien, mejor; pero si no sos buena persona, en nuestras selecciones no tenés lugar”, confesó con firmeza.
En este Argentino hubo jugadores de Selección, Campeones Mundiales de 2016 en Mónaco; pero Urra también vio aquí “un abanico de chicos con muchas chances. Es que las oportunidades son muchas. Con Francisco Mendieta y José Gáspari de Córdoba, y Eduardo Luján de Pergamino (el cuerpo técnico completo de la selección), vamos a sacar uno para el Zerbín, otro para la Rafa Bolo y otro en Panamericano; se necesitan bochadores, pero también que tengan idea de arriba y fundamentalmente punteros. Tenemos que encontrar arrimadores de canchas sintéticas, que es donde se va a jugar el Panamericano de Uruguay”.
La Confederación “ha profundizado el trabajo de los menores y se amplió muchísimo el seguimiento con los cuatro técnicos que te mencioné. A los mayores no los seguiremos porque ya sabemos lo que dan, estaremos en todo lo concerniente a los menores. Vamos a ir a todos lados”, aseguró Urra.
El trabajo inmediato “es sentarnos y ver qué cinco jugadores vamos a llevar a Colonia, Uruguay, a mediados de octubre. No sólo tienen chances los de Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos; La Pampa, Mendoza y todos los que tengan menores van a estar. Estoy seguro que iremos con las mejores chances para ganar; queremos concentrar a la selección una semana antes para practicar todo. Pero Argentina está, como siempre, para ganar”, destacó Urra.
En el plano mundial, Argentina sigue “en los primeros puestos de todas las especialidades. Argentina es muy respetada. El presidente Alberto Limardo ha confesado que las bochas pueden ser olímpicas en 2024; hay que preparar a los chicos de 13-14 años que estuvieron, por ejemplo, acá, ya que será para menores de 23 años. A través de esta gestión y del COA se consiguen muchas cosas, hay que seguir trabajando”, reconoció el bahiense.
– ¿Hubo algo que lo sorprendió de esta Argentino?
– Sinceramente no. La sorpresa para mí fue Martín Aristain y su título; mejor dicho, no me sorprende tanto, pero sí me despierta una gran alegría. Un chico de 15 años de La Pampa también fue para destacar y el entrerriano Obregoso, de 20 años, que jugó la final en Individuales y nunca vistió la camiseta Argentina. Al resto ya los conocemos. Nada es fácil para ninguno, pero todos tendrán una oportunidad.
– ¿Esta actuación y este título hacen que haya un seguimiento o posibilidad distinta para Aristain?
– Tengo que decirte la verdad, y Martín se ganó una posición por sí solo. Pero antes de que él ganara, nosotros ya estábamos sobre su figura; porque un chico tan tranquilo, tan noble y que me ha encantado con el trato que he tenido fuera de la cancha, no puede ser dejado de lado. Tranquilamente puede estar en una preselección; no depende sólo de mi y debemos tener en cuenta la cantidad de chicos que hay. No está confirmado, pero tiene chances…
A Juan Pablo Urra se lo nota motivado y con una gran ilusión. “La Confederación quiere gente joven, con empuje. A los chicos les voy a trasladar lo mejor con mis compañeros, es la manera de crecer. Me voy de Tres Arroyos feliz con los días vividos, con la organización, con el trato y respeto que hubo. No hay palabras que alcancen para describir lo bien que estuvo todo”, destacó el técnico nacional.