“IRRADIANDO VIOLACEA LUZ APARECIO EL PLATO”. Así, en mayúsculas, titulaba el diario El Plata la página 5 de la edición del 12 de julio de 1947. Y bajo dos chistes que hacían referencia a lo sucedido, otro título en menor tamaño pero de igual importancia: “La Plata tiene la primicia sudamericana de haber observado nítidamente el fenómeno”. Y más chico aún: “Posóse antes de desaparecer sobre un naranjo de 56 y 25”. Es decir, muy cerca del Parque Vucetich o San Martín.
Esas tres líneas de texto marcan un acontecimiento importantísimo en la joven historia de la ovnilogía. Fue la primera vez que se vieron ovnis en Argentina en la “era moderna” del fenómeno, es decir, tras la famosa observación del 24 de junio del mismo año, cuando Kenneth Arnold acuñó en EE.UU. la expresión “platillos voladores”. Porque esos platos comenzaron a verse por todas partes. Hay reportes de toda Europa y de otras partes de Estados Unidos. Días antes de lo sucedido en La Plata, testimonios dieron cuenta de las extrañas luces en Chile, Brasil y Uruguay, mal que le pese al redactor de El Plata.
El Día, en su edición del 12 de julio, comenta: “Ya comenzaron a volar sobre nuestro cielo los platillos voladores que tanto preocupan y tanto están dando que hablar al mundo”. Lo cierto es que en la capital bonaerense el hecho causó una gran conmoción. “La irradiación violácea del famoso plato y su desaparición subrepticia a los quince minutos de haber aparecido conformaron un espectáculo de magia”, afirma El Plata. El 13 de julio, El Día afirman en su artículo “Los que vieron el primer plato”: “Aseguran que vieron la esfera rojiza, que avanzaba velozmente desde el este para desaparecer rápidamente”. Aunque los redactores se toman el asunto un poco en broma, se habla de distintas teorías, como la psicosis colectiva y fenómenos meteorológicos.
Enseguida comenzaron a recabarse testimonios de otros puntos del país. El Argentino, diario platense que no había informado sobre el caso de 56 y 25, habla de una visualización en 25 de Mayo, y a partir de ese momento los casos “explotan”. Los ovnis habían llegado al país.
Homenaje en el parque
En abril de este año el grupo ICOU (Investigadores de Campo Ovni Unidos) se reunió en La Plata y puso una placa en el Parque San Martín como homenaje a aquel avistamiento de 1947. Al respecto Luis Burgos, referente de la FAO (Fundación Argentina de Ovnilogía) y de ICOU, cuenta que “creamos ICOU en 2014 en Máximo Paz, provincia de Santa Fe. Ya se hicieron nueve eventos en el país. En cada provincia, por costumbre, ponemos un reconocimiento de acuerdo al caso emblemático que haya. El primer monolito fue en la estancia Villaverde, en La Pampa, por un caso de 2010. El segundo fue en Venado Tuerto por el caso La Victoria, de 1978, un encuentro cercano. Cuando nos tocó a nosotros en La Plata decidimos poner dos. Uno por la Zona 72 (NdR: una franja en esa avenida platense donde hay apariciones de huellas) y otro por el lugar donde se produce el primer caso en el país. También pusimos otra placa en Punta Piedras”. (DIB).
Cápsula del tiempo
El grupo ICOU, en ocasión de los 70 años del avistamiento de ovnis que dio nacimiento a la ovnilogía, instaló en Máximo Paz una cápsula del tiempo con información sobre ovnis para ser abierta en 2117.
Según Burgos, “hay un montón de cápsulas del tiempo enterradas, tanto en Argentina como en el mundo, pero ninguna tiene que ver con ovnis. En uno de los capítulos de mi último libro, Operación Mississippi, se habla de un grupo de mujeres que instala una cápsula del tiempo en Cleveland en 1896 que se abrió un siglo después. Ahí tuve la idea”. – DIB –