En Claromecó se siente parcialmente el efecto de las medidas tomadas en función de la educación privada. En la localidad hay dos servicios privados como son el Jardín de Infantes Maris Stella y el Instituto Secundario Claromecó. Como se ha dicho en innumerable cantidad de oportunidades, dichos servicios no son privados por elección, sino más bien por necesidad.
En su momento, al no contar con jardín o secundario estatal, los mismos debieron crearse, y dependen de otras entidades intermedias. En el caso del Jardín de Liga de Madres de Familia, y en el caso de la secundaria, la misma nació estatal, pero luego se cerró.
Fue ahí donde la comunidad reaccionó y creó la Asociación Cultural y Educativa Claromecó, la ACEC, que es la entidad propietaria del instituto. Pero no se hizo con un fin comercial, sino todo lo contrario, para garantizar la instrucción media para los alumnos.
Este diario consultó a María del Carmen Rodríguez, la directora del Jardín Maris Stella, quien sostuvo que “en nuestro jardín esta situación no se siente porque todos quienes ejercemos cargos tenemos título habilitante, por eso el estado sigue abonando los sueldos correspondientes”.
Rodríguez agregó que “sabemos la realidad de los establecimientos de la zona que están sintiendo esta medida, que en mi opinión está bien, porque intenta ordenar una situación, pero se aplicó con muy poco tiempo. No hubo el tiempo suficiente para reordenar y buscar profesores con título habilitante, que en una localidad chica es bastante difícil encontrarlos”.
Un derecho
También se pronunció Néstor Castro, presidente de ACEC. Destacó que “en el Instituto Secundario Claromecó esta medida se siente en forma parcial. Esto es aplicar normativas que siempre existieron, pero había excepciones. No siempre se consigue profesores con título habilitante para dar clases en las localidades. Y uno como comisión siempre prioriza que el alumno no se quede sin las clases”.
Agregó Castro que “creo que el inconveniente está dado en que se aplica la misma normativa para toda la provincia, y no es lo mismo el Gran Buenos Aires que el interior del partido de Tres Arroyos. Los servicios educativos privados de toda la zona no son empresas como hay en las grandes ciudades. En todos los casos se trata de asociaciones civiles, de comisiones como la nuestra, que tienen que trabajar mucho para mantener en condiciones la educación secundaria. No se trata de gente que gana dinero con la educación privada, por eso deberían haber excepciones. Sabemos la realidad de los institutos de la zona y es muy preocupante, porque afecta directamente el derecho a la educación”.
Preocupación en Copetonas
También al Instituto Secundario Almafuerte de Copetonas llegaron comunicaciones del gobierno provincial con efecto retroactivo, por lo cual dejó de recibir parte de las subvenciones para salarios docentes.
Ante una consulta de este diario, se indicó que son tres los docentes afectados por esta medida hasta el momento.
Ante una consulta de este diario, se indicó que son tres los docentes afectados por esta medida hasta el momento.
La entidad no cobra cuota, debe solventar los gastos de mantenimiento del edificio, así como salarios del personal de maestranza, bibliotecario y el pago de las tarifas y servicio de Internet, entre otras erogaciones.