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El Búho se renovó y fue un éxito

Este verano volvió a abrir sus puertas “El Búho”, un lugar mítico y con historia en Claromecó que se reversionó para ofrecerles a los turistas un espacio de comidas, tragos y música. La opción fue realmente elegida por muchos, y devolvió un poco de la historia del bar que anteriormente se posicionó en calle 22 entre 3 y 5 que funcionó en el periodo 2000-2009 y que llevaba el mismo nombre. 

Mariano Gómez junto a su socio Eduardo Menna decidieron sumar una cervecería que contara con shows para las personas más grandes, algo distinto en la localidad. Menciona que costó, porque “el lugar está catalogado como únicamente restaurante pero se animaron y sirvió”. Muchos de los comensales disfrutaron de cantidad de artistas que llevaron su música a los rincones de El Buho actual: Sergio Pessina, Billy Wilson, Turco Chiodi y Pancho Santarén, este último uno de los más pedidos y esperados por todos. El reconocido artista folklórico, ofreció un show en el que hubo espacio para todas las edades, y todo tipo de ritmos. Acompañado por su guitarra y a veces por espectadores que se animaron a subirse al escenario, “no falló nunca” y la cuadra se volvió una fiesta.

Mariano Gómez (Fotos:Carolina Mulder)

Actualmente se encuentra en calle 11 entre 26 y 28. Su dueño indica que la idea fue mutando para ir ofreciendo lo que los veraneantes esperaban y poder cumplir con los requerimientos “arrancamos con un poco de tapeo y un par de platos principales, pero la misma gente lo empezó a moldear. Si no hay show, come y se va”.

Contento por las críticas y las devoluciones de la propuesta, también indicó que “no queremos mezclar. La cena es primero y el show posterior, porque a veces quienes quieren cenar no tienen ganas de verlo y los que vienen solo a disfrutar de la música no les convence que haya gente cenando”. 

(Fotos:Carolina Mulder)

Años atrás 

Desde el año 2000 hasta el 2009, los claromequenses y los veraneantes tenían la posibilidad de pasar un buen momento en lo que era el bar El Búho, que tenía lugar en el barrio de los boliches, en calle 22 entre 3 y 5. Impulsado por Mariano y su también actual socio, Eduardo Menna, cuando tenían apenas veinte años, fue una marca registrada en el corazón de todos los que tuvieron la oportunidad de bailar dentro “fue un bar de amigos que pasó a ser tipo boliche”. 
El logo, la decoración y la tipografía es la misma, por lo que hay parte de ese Búho original. Mariano dice que “la gente que iba a El Búho ahora salen a comer acá porque son personas grandes con familia y no van al boliche”. Lo que posiblemente, les arroje recuerdos imborrables de buenas anécdotas y momentos compartidos entre amigos. “El Búho durante mucho tiempo fue reconocido, pensamos en usar el nombre para imponer no sé si una marca pero si aprovecharlo ya que hay gente que nos identifica con eso”; en redes sociales aún hoy están las fotos de aquellos momentos y cuando anunciaron la apertura el concepto trascendental fue “reapertura”.
Apostando también al invierno 
Mariano hace veinte años que eligió la localidad balnearia como su hogar por lo que le permite seguir apostándole en otros periodos fuera de la temporada. En este caso, quedará abierto los fines de semana también creyendo en la idea de que debe haber opciones en cada mes, “somos de la idea de que tiene que haber cosas en Claromecó; siempre se reniega de que no hay nada. No hay nada porque la gente no viene, y la gente no viene porque no hay nada. Es como la historia del huevo y la gallina”, mencionó.

(Fotos:Carolina Mulder)

Si bien es cierto que cada vez hay más locales que apuestan y proponen, ellos serán uno más en el radar de los que eligen la zona en diversos periodos anuales. Aseguró que debe haber actividades y eventos que convoquen, pero para ello es necesario brindarse a quienes visitan, “si hacés venir gente a por ejemplo una carrera y no tiene lugar para hospedarse o para comer no podés ofrecer el lugar como destino turístico fuera de temporada. Sí o sí tenés que dar el servicio”, explicó. 

Además dijo que es una forma de dar trabajo a los locales que si no tienen que irse hacia otro lado. Quienes trabajan en el comercio “son todos chicos de Claromecó que se fueron haciendo en las cocinas de acá y la verdad me han sorprendido gratamente. Los llamé sabiendo que sabían trabajar pero estoy realmente muy conforme”.
El servicio fue un éxito, las críticas han sido muy buenas y van por más. Una de las características más importantes a la hora de ser servidores, es que la atención sea buena ya que invita a volver. “Hay muy buen grupo de trabajo” y eso se ve reflejado. “Siempre que hemos tenido comercio pensé que la idea es atender como a vos te gusta que te atiendan”, dijo al concluir.      

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