A 31 años del atentado a la AMIA
“Volaron la AMIA, igual que la embajada de Israel. Estoy enfrente de un edificio que está a punto de desplomarse al frente de la AMIA y ocho pisos. Están retirando chicos ensangrentados, mujeres, niños. Quedó destruido. Piden ambulancias. Hay gente destrozada, mutilados. Escombros por todos lados”, fue el relato que se oyó por la radio el 18 de julio de 1994. Ese día, la tragedia en Buenos Aires se volvió a repetir: una bomba estalló en una dependencia de la comunidad judía a las 9:53 de la mañana en Pasteur 663. Dos años antes, volaron la embajada de Israel en Argentina.
El atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina ( AMIA) fue producido por un coche bomba que se detonó en frente a la entidad, ubicada en el barrio porteño de Once. Policías, médicos y los propios familiares emprendieron la búsqueda de todas las personas que estaban allí. El rescate duró todo el día y dejó un saldo de 85 fallecidos y alrededor de 300 heridos.