La partida de Tito Fraile, un artista de las vidrieras
El domingo se produjo el fallecimiento de Antonio Facundo “Tito” Fraile, quien fue un destacado decorador de vidrieras y empleado de comercio (el afiliado número 345 del Sindicato, dijo en una entrevista con este diario en 2022).
Su padre se llamaba Antonio y su madre Leonisa, ambos inmigrantes españoles, quienes tuvieron tres hijos.
En la adolescencia, tuvo su primer empleo “en la farmacia González, estaba en avenida Moreno y 9 de Julio”. Luego trabajó en Café Tres Arroyos y cuando tenía 15 años, fue incorporado en Arteta.
Interrumpió su trabajo porque le tocó el servicio militar y lo asignaron a la Marina, donde permaneció aproximadamente dos años.
Fue asignado a la parte de máquinas del barco tanque ARA Punta Médanos y pudo conocer Estados Unidos, así como países de Europa.
Una vez finalizado el servicio militar, retomó la actividad en los comercios. Su labor en Arteta finalizó cuando no aceptó el traslado a Bahía Blanca; posteriormente se desempeñó en Blanco y Negro; durante poco tiempo en la sucursal que Tiendas Molinari tenía en General Pico, La Pampa; en Gath & Chaves; en Harrods, en la ciudad de Buenos Aires; en sedería Latorre; entre otros.
Después de hora, preparaba las vidrieras de otros locales como Casa Mulazzi, Botolandia, Librería Carabela, una etapa en Spenza. Llegó a tener alrededor de 20 locales en los que concretaba este trabajo.
En Gath & Chaves permaneció 21 años, lo enviaban dos veces por mes a colaborar en Bahía Blanca y también a Azul.
Un tiempo valioso y especial vivió junto a Ismael Suria, cuando llamó a la pantalonería que estaba ubicada en calle 9 de Julio. Allí permaneció durante 24 años; con gratitud, destacó que “me pagaba el sueldo de convenio más una comisión de todo lo que se vendía”. Definió a Ismael como “empleador, compañero, amigo”.
Formó una familia con Dora Renée Alvarez, quien fue “la única mujer que conocí en mi vida”. Tuvieron tres hijos: Adriana, Daniel e Inés, llegaron nuevas generaciones con los nietos y bisnietos. Ser abuelo y bisabuelo constituyó un motivo de emoción y enorme alegría para Tito.
Expresó su creatividad a través del dibujo y la pintura. En julio de 2022, el Sindicato Empleados de Comercio inauguró su Espacio de Arte, en instalaciones de la Biblioteca Cacuri, con una muestra de sus obras inspiradas en Florencio Molina Campos. Un reconocimiento que valoró mucho, a partir de una invitación y convocatoria de Hugo Costanzo.
Le brindó su estilo a numerosas tiendas, hizo un arte del oficio de decorador. Tuvo el don de la amabilidad, el servicio, como pudieron apreciar todos los vecinos que alguna vez fueron atendidos por Tito.