Hoy, como cada 12 de mayo, se celebra el Día del Fonoaudiólogo. Marilina Pescader hizo referencia a su experiencia con niños, adolescentes y adultos, así como en el ámbito escolar. Describió la amplitud de tareas que abarca la profesión y destacó que “hubo muchos avances”
Hoy se celebra el Día del Fonoaudiólogo, fecha establecida por el aniversario de la creación de Asalfa (Asociación Argentina de Logopedia, Foniatría y Audiología). Fue la primera entidad científica fonoaudiológica del país, que nació en 1948.
Por este motivo, La Voz del Pueblo dialogó con Marilina Pescader. En el inicio de la entrevista, explicó que “me recibí en 2022, estudié en el Instituto Superior de Formación Docente y Técnica 33. Después sumé la licenciatura en Mar del Plata, en FASTA (Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino)”. En este sentido, dijo que “nos piden ser licenciados, para tener un enfoque más específico, porque la fonoaudiología está abarcando mucho”.
Además realizó “un posgrado en TEA (Trastornos del Espectro Autista).Lo hice totalmente virtual, es como una diplomatura”.
Un eje
Su labor profesional consiste en la atención en consultorio a “niños, adolescentes y adultos en el área de comunicación, lenguaje, voz y deglución”.
Otra actividad es un censo foniátrico que está desarrollando en el Colegio Jesús Adolescente, para jardín y primaria: “Me llamaron, me siento muy agradecida. También constituye un aprendizaje para mí, es la primera vez que hago un censo. Es valioso que se conozca la importancia del fonoaudiólogo en el colegio, en el ámbito escolar, y en el equipo”. La tarea con chicos es relevante, están “en pleno crecimiento y en escolarización”.
Marilina Pescader observó que “muchos nos conocen porque somos los que arreglamos la ‘erre’, es lo común. Pero la profesión abarca numerosos aspectos vinculados con la comunicación, la deglución, la respiración y la audición”.
Es una tarea que “se está conociendo mucho más”. Sobre la respiración, puntualizó que “un niño que respira por la boca va a dormir mal, suelen roncar también. Te das cuenta porque tienen la boca un poquito abierta, están como más encorvados. En consecuencia, la lengua no se posiciona donde debe estar y eso conlleva a que el paladar no crezca como tiene que crecer. Se van encadenando dificultades”.
La comunicación está presente cada día, en el vínculo con los demás, la vida social y laboral. Es un eje de la fonoaudiología.
“En oratoria se utiliza mucho aprender sobre respiración. También la higiene para cuidar las cuerdas vocales, si trabajás mucho con la voz es sumamente importante para que después no surjan disfonías u otros inconvenientes”; argumentó.
En su análisis, valoró que “se lograron muchos avances en las estrategias de estimulación, las evaluaciones, también hay aparatos nuevos”. Y reiteró que “la profesión está más visible”.
Mencionó que “no hay tantas escuelas con el Equipo de Orientación Escolar completo, por eso en su momento se abrió la carrera en Tres Arroyos. Hacía faltar contar con más profesionales que ejerzan esta disciplina. Es muy importante para la lectura y la escritura”.
Las consultas
Recibe diversas consultas, que expresan la amplitud de la fonoaudiología. “Los profesionales de la voz acuden mucho por las disfonía. Hay quienes se acercan por la pérdida de la audición. En enfermedades degenerativas como el Alzheimer, se trabaja todo el lenguaje y el habla en esas personas, también la deglución porque muchos tienen disfagia”, indicó.
Entre los niños, se producen igualmente “disfonías. Y distintas situaciones de comunicación, la lingüística, la sintaxis y el lenguaje. Hay casos de Trastorno de los Sonidos del Habla (TSH), que anteriormente se llamaba dislalia. Cuando el chico no puede pronunciar la ‘erre’ o cambia la ‘erre’ por la ‘d’ o no le sale la ‘ese’. En poco tiempo, con fonoaudiología, se soluciona”.
Compartió una recomendación: “Siempre le digo a los papás, ante la duda andá a un profesional, sacáte todas las dudas, preguntá. El te va a saber decir si ‘está bien’ o ‘vamos a trabajar en esto’. Es para confirmar, tener certezas”.
Al respecto, reflexionó que “tal vez los padres dicen a mi hijo ya le va a salir. A veces pasa, pero en muchas otras ocasiones no y es algo que lo afecta cuando va al colegio a aprender”.
Está en contacto con otros profesionales. “Todo lo que es deglución lo trabajo con un odontólogo siempre -afirmó-. Muchas veces los nenes tienen que usar aparatos y entonces nos ponemos en contacto. También lo hago con la psicopedagoga, por ejemplo. Nos desempeñamos mucho en conjunto, igualmente ante diagnósticos de TEA. Se generan redes, es muy positivo”.
Como parte de su formación, realizó cursos referidos a la educación, con el objetivo de “generar estrategias destinadas al docente, para nenes que tienen diversas dificultades, así puede llegar a ese alumno”.
Añadió, en este contexto, que “se detectan casos de dislexia, las maestras con herramientas adecuadas contribuyen en que el alumno pueda aprender con mejor calidad”.
Atención temprana
El consultorio donde atiende Marilina Pescader se encuentra ubicado en Pellegrini 342. “El sistema que utilizo es a través de WhatsApp, escriben y coordino los tunos”, sostuvo.
Asimismo, tiene una página en Instagram, que es fono.marilina, espacio en el que publica material para padres. “Busco ayudarlos a que dispongan de tips, que les permitan estar atentos. Acerca, por citar un punto, de cuando se pronuncian las primeras palabras. Para estimular el lenguaje en casa, hay juegos”, manifestó.
Finalmente, Marilina Pescader consideró que es central “la atención temprana en niños. Por esta razón, voy subiendo este material de interés y para que me vayan conociendo”.