El sujeto había sido apresado la semana pasada en el marco de una denuncia por haber violado una perimetral en perjuicio de su ex pareja. 

Agustín Arias, de 28 años, fue liberado en el mediodía de ayer por orden de la misma Justicia de Garantías; aunque desde la fiscalía especializada en delitos por violencia de género, se dispuso una custodia policial permanente en el domicilio de su ex pareja. 

En tanto desde la UFIJ Nº17, a cargo del fiscal Gabriel Lopazzo, se interpuso una oposición a la liberación; no obstante a favor del imputado se habría considerado que aún no tiene antecedentes penales, y que la suma de sus causas individuales abiertas permiten su excarcelación. 

 Recordamos que Arias fue encarcelado después de ser interceptado por la policía cuando circulaba en un auto robado en el marco de una denuncia por violar una medida perimetral de su ex pareja. 

En ese contexto, una vez que las fuerzas policiales requisaron su vivienda y la de su madre, incautaron otro vehículo con papeles falsos y, en un maletín, distintos elementos que hacen suponer a los investigadores la probable realización de una actividad delictual. 

 Una vez arrestado en la noche del miércoles 30 de marzo y, después de haber cumplido con los requisitos que fija el artículo 308 del Código Penal, la UFI N°17 solicitó su detención al Juzgado de Garantías en el marco de una causa por “desobediencia y encubrimiento”. 

 Al mismo tiempo, se supo que desde una Fiscalía de La Matanza estaba vigente un pedido activo de paradero. 

Producto de la investigación que se lleva adelante por la situación de Arias, como por ejemplo la realización de distintas tareas investigativas realizadas por personal y GTO de la Comisaría Primera, y las distintas declaraciones testimoniales recibidas, se estableció que el aprehendido se dedicaría a la reproducción de documentación apócrifa de vehículos que posteriormente se pondrían a la venta.

Es por eso que oportunamente -por razones de necesidad y urgencia- se concretaron los allanamientos en los que se secuestraron -desde el interior del Chevrolet Cruze- 29 teléfonos celulares, 7 tablets y una notebook, todos ellos para ser peritados en el marco de la investigación.