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La ayuda que cambió la vida de Dante

Dante Guaytifil está a un paso de terminar los estudios en la Escuela Secundaria 3, en el Barrio Villa Italia. Ya disfrutó con sus compañeros del viaje de egresados que tuvo como destino a Miramar, una experiencia que no va a olvidar. 

Hace pocos días recibió el boletín y con la excepción de dos aspectos que están en proceso de aprendizaje, vinculado uno de ellos a la participación en clase, tiene muy buenas notas. Es tímido, a veces intervenir le cuesta, pero muestra mucha voluntad. 
Reside en el Barrio Santa Teresita, donde dialogó con La Voz del Pueblo acompañado por su abuela Claudia y su mamá Yanina. Su historia es conocida, carecía de una computadora y afrontaba así muchas complicaciones para desarrollar las tareas para la escuela; pero se realizó una campaña que contó con un gran apoyo y en pocos días, recibió el mencionado equipamiento como donación. La ONG Huellas al Futuro se hace cargo del costo del servicio de Internet, para colaborar con la familia. 
El gran día para Dante fue el 26 de mayo de 2021, cuando recibió la computadora. La reacción de personas de distintos lugares de la ciudad y el país fue inmediata; Valentina Pereyra y Leticia Menna consiguieron donaciones, Luis Menna reunió aportes de amigos, Martín Urrutia ayudó en la logística y le enseñó a Dante como usar su computadora nueva. 
También el club Boca, donde juega como delantero, llevó adelante una campaña y su presidente Edgardo Rodríguez se acercó a su casa, en la jornada de la entrega.
 Su abuela reiteró el agradecimiento “a toda la gente que colaboró para la compu, al club Boca porque ni bien tomaron conocimiento de que se estaba haciendo la colecta, me llamaron para decir que me iban a ayudar”.
 Al describir el último boletín, dijo que “en general viene bien. Estoy contenta porque se dedica, es responsable”. De primero a tercer año los cursó en la Escuela Secundaria 3, cuarto lo hizo en la Escuela Secundaria 1 y luego volvió al establecimiento escolar de Villa Italia. 
 Claudia explicó que “los tres primeros años cursó de 7.20 hasta poco después de las 14. Como cuarto era en turno tarde, pidió ir a una escuela en turno mañana y lo cambiamos a la Media. Ahí hizo un año, cuando estaba por terminar en la Secundaria 3 le comunicaron que había un cambio de horario, entonces pudo volver”. 
 En pandemia 
Las grandes dificultades para Dante surgieron en 2020, durante la pandemia de Covid-19. Para acceder a una computadora, debía ir hasta la casa de la tía; “está cruzando la ruta, detrás de la Rural -comentó su abuela-. No se podía salir, pero él tenía que ir igual. Como la computadora la usaba una de mis sobrinas, porque estudia para ser maestra, Dante la tenía disponible antes de las 8. Todos los días se levantaba temprano, hacía todas las actividades y volvía”. 
 En una etapa del año, en la casa de su tía la utilización de la computadora era permanente y Dante entonces acudió a El Parquecito, en Ruta 3 Sur. 
 Claudia recordó que “una profesora de Matemática me llamó en 2020 y me dijo ‘me acabo de enterar como está estudiando Dante, no sabía’. A través de mi teléfono le fue explicando todo y pudo dar la materia, le dio ayuda para que hiciera su último trabajo. Estamos muy agradecidos también con integrantes de nuestra familia que cuando pudieron prestaron la computadora, fueron muy generosos”.
 Por su parte, Huellas al Futuro ha estado pendiente, en forma reciente establecieron un contacto, preguntaron por él y renovaron por un año más la cobertura del servicio de Internet. 
La computadora funciona perfectamente, Dante así lo destacó. Es de pocas palabras, no obstante lo cual dejó en claro que su vida cambió con la posibilidad de tener la tecnología necesaria en su casa. “En la escuela me siento muy bien”, señaló. 
Quedó atrás el año “más bravo”, que fue cuarto, por la pandemia y todas las limitaciones que tuvo que superar. Ya en los primeros meses de quinto, se encontró ante la sorpresa tan anhelada, posee a partir de entonces las herramientas necesarias para estudiar. 
 Realizó la Primaria en la Escuela 2 y luego en la Escuela 26, donde el profesor Miguel Lemos lo invitó a jugar en Boca. Concurre desde muy chico e integra el plantel de la Séptima División, aunque ha jugado en alguna oportunidad en Tercera. 
El diálogo tiene para Claudia un lugar preponderante, es una manera de proceder. “Cuando hay algo que no anda bien se habla”, afirmó y de inmediato, reiteró: “yo lo hablo enseguida, ‘esto no es así, no lo hagas más’. Se conversa, le hacemos entender que todo lo que marcamos o decimos es para el bien de él”.
 El futuro 
Con 17 años de edad, Dante en caso de seguir estudios superiores, mantiene la idea de realizar el Profesorado en Educación Física. Es el mayor de cuatro hermanos, los tres restantes son “dos nenas y un varón”. 
 Sostuvo que “en Boca hay varios profes, algunos son nuevos, se recibieron hace poco”. Es una carrera que le atrae y tanto su madre, como su abuela, valoran que se puede hacer en el Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº33 de Tres Arroyos. 
También “la compu” le va a servir cuando quiera averiguar detalles de esta disciplina, cómo es la formación y salida laboral. Su mamá Yanina expresó que “tiene ganas, entusiasmo. Es algo que creo le puede llegar a gustar y durante la carrera te envían a hacer prácticas. Es una gran ventaja, igual que Internet”. 
La abuela también cuando puede estudia para ampliar sus conocimientos, es una herramienta que extiende el horizonte de toda la familia. 
 En el cierre de la entrevista, Dante manifestó que “voy a seguir entrenando y jugando en Boca”, mientras se encuentra en el período final del Secundario y analiza qué actividad va a concretar a partir de 2023.  
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