Para Cristina no es posible dejar de pensar en el Vía Crucis, es por eso que el año pasado, al finalizar la presentación, se le ocurrió recrear para este 2023 la Última Cena, así lo cuenta: “se lo propuse al delegado y me dijo que contara con él porque donde lo quiero hacer necesito llevar luz y sonido. Va a ser a la entrada del Vivero, en esa barranca que hay, ya tengo los 12 apóstoles, el año pasado con lo recaudado en las obras y otro poco de dinero que me ayudó el Ente Descentralizado compré todos los cortes de tela. Estamos junto a Graciela Altuna confeccionando las túnicas nuevas para los apóstoles que son personas que ya están en el Vía Crucis”.

La puesta en escena se realizará el día viernes 07 de abril y según comenta Cristina, se espera que sea una ceremonia corta que comience a las 20:30. “Casi seguro lo voy a ver al Diácono José Luis para que vaya hablando por el micrófono mientras se sucede la última cena con música acorde como es mi costumbre. Una vez que esté terminando la ceremonia, quiero que todas las chicas que hacen de pueblo en el Vía Crucis repartan pan para las personas que vayan”, detalló Caballero.

Para la coordinadora del grupo esta nueva representación es como una conmemoración por los 20 de años del Vía Crucis que quedó trunca a raíz de la pandemia.

 En cuanto al Vía Crucis el día sábado 8 de abril comenzará como todos los años a las 15:30 y contará con el acompañamiento para la organización del Ente Descentralizado, bomberos y el grupo scout.

Cristina Caballero expresa que no prevé hacer renovaciones o cambios, sin embargo, manifiesta: “me surgen en el camino a medida que vamos ensayando, en cuanto a los personajes se me está agregando gente del pueblo, pero los que hacen los papeles principales serían los mismos. Nahuel Montero, Marita Caldas, Ana Fuente, Nora Fuente, Claudio Menéndez, Fabián Rodrigo, el elenco estable no tiene modificación”, aseguró.

Con evidente felicidad Cristina anuncia que para este año se le cumplió un gran sueño. “Se aprobó el proyecto para terminar el frente del castillo de la primera estación, van a terminar las columnas hechas de cemento, el balcón hecho de piedras, el portón con herrumbres antiguos, todo eso va a estar hecho y va a quedar maravilloso”, describió.

En relación a los ensayos la coordinadora del grupo de teatro independiente señaló; “el Vía Crucis está súper aceitado, vamos a hacer cuatro o cinco pasadas y Nahuel Montero, que hace de Jesús, tiene una velocidad en la memoria que si hago un cambio se lo aprende en el instante”.

Sí priorizará ensayar la puesta de la Última Cena, “tengo reunirme con todos, proponerle a cada uno qué es lo que quiero, qué es lo que quiero que vea la gente, que no es fácil, porque con mímica ellos van a tener que demostrar lo que sucedió en esa última cena”, explicó.

Cristina no deja de sorprenderse por el efecto que el Vía Crucis produce en el público, “a lo largo de los años hemos visto gente que pierde el calzado y no vuelve a buscarlo, mujeres que han terminado con ampollas en las manos por no soltar la soga de los bomberos, una señora con andador que logró llegar a la última estación y se largó a llorar, otros que piden tocar la túnica de Jesús”.

Todos los miércoles de enero y febrero, Cristina y el grupo de teatro independiente presentaron la obra Europa en el Espacio de Arte Quelaromecó.

Para el grupo fue un desafío hacer una puesta de época, y la respuesta del público superó ampliamente las expectativas.

Al respecto Cristina expresó que resultó ser de “veinte puntos, masiva, llenamos todas las funciones. Yo les decía que no veía ni una cara de Claromecó, era gente que no nos conocía, obviamente la vamos a seguir dando a lo largo del año. Ya tengo fechas en Tres Arroyos, en Chaves y en Orense. Tenemos que esperar que uno de los actores se ponga bien y luego volvemos a arrancar con las presentaciones”, sostuvo.