La Ciudad

Plaguicidas en zonas urbanas

Fitosanitarios: Afirman que controlar su aplicación requiere de recursos

06|02|19 09:18 hs.

Cuando todavía el municipio de Tres Arroyos no adhirió a la resolución del Ministerio de Agroindustria bonaerense que regula la aplicación de plaguicidas, en una reunión desarrollada ayer en el Concejo Deliberante se compartió como dato citado de manera recurrente, que los dos funcionarios con poder de control necesitan recursos, como un vehículo pero también personal. 


Sólo la fiscalizadora zonal de la Provincia, la claromequense Lorena Ceriani; y el secretario municipal de Gestión Ambiental, Ricardo D’Annunzio, intervienen ante las denuncias de vecinos por aplicaciones que puedan estar dándose en proximidades de zonas urbanas y rurales. 

En el marco de la reunión compartida con concejales de distintos partidos políticos revelaron que a veces actúan juntos, o por separado si es que están lejos uno del otro. Pero afirmaron que dada la cantidad de avisos que reciben requieren de colaboradores, sobre todo de ingenieros agrónomos. Y también de un vehículo.

“Muy escasos”
Fue D’Annunzio quien contó que habiendo tomado contacto con el director provincial de Fiscalización Agropecuaria, Alimentaria y de los Recursos Naturales el ingeniero Luis María Herrera, recibió como respuesta que “por ahora de recursos estaban muy escasos de poder otorgarlos”. 


El titular de Gestión Ambiental, Ricardo D’Annunzio y la fiscalizadora de Agroindustria de la provincia, Lorena Ceriani, compartieron una reunión informativa junto a concejales


Explicó el funcionario municipal que mientras el municipio “estudia” la posibilidad de adherir a la resolución, insistieron en pedir “alguna movilidad porque ayudaría al trabajo de la secretaría porque además de la fiscalización de agroquímicos, también se trabaja en industrias junto a la OPDS en todo lo que es residuos, como habilitaciones de las industrias y denuncias de todo tipo que tomamos porque somos la primera línea de contacto con el vecino. Y necesitaríamos algún tipo de ayuda, hablábamos de que ante una denuncia se debe actuar inmediatamente”, afirmó.   

Sin recetas
En todo momento D’Annunzio resaltó lo positivo que representa tener en Tres Arroyos a la fiscalizadora zonal de Agroindustria –por Ceriani- con quien puede ponerse “de acuerdo rápidamente” para las intervenciones que en mayor medida se dan porque a los aplicadores les falta presentar “la receta”, que es la descripción ordenada por un profesional para administrar las drogas sobre las plantas, según la funcionaria.

A esta situación, el responsable local de las políticas ambientales las comparó con la automedicación en las personas. Y remarcó que en la actualidad las órdenes referidas se las puede confeccionar y enviar de manera digital.  

Denuncias formales 
Por su parte, Ceriani contó en medio de la reunión entre concejales –y posteriormente a la prensa- que sus autoridades le exigen que no se acepten más denuncias con fotos de Facebook y videos, de manera anónima. “Alguien se tiene que hacer cargo de la denuncia”, sostuvo la mujer que contó como anécdota cierta oportunidad en la que asistió a una dirección en donde había sido visto un mosquito en tareas de fumigación, pero que finalmente resultó ser “una sembradora”. 

En este sentido señaló que “el objetivo es que el vecino damnificado, o que vea una aplicación en una zona irregular en la que no se deba hacer, llame al 147. Que aporte todos los datos precisos y que firme la denuncia”. 

Precisó Ceriani que ante una denuncia bien hecha “y con datos fehacientes, no importa cuándo lleguemos. Al estar la denuncia después te vamos a tomar declaración de lo que estás diciendo y en función de eso vamos a ver a la persona que tengamos que ver”. 

El meollo 
La fiscalizadora que cubre Tres Arroyos, Gonzales Chaves, San Cayetano y Necochea –junto a un compañero- también hizo partícipes de un mejor control de la aplicación de fitosanitarios, a los ingenieros agrónomos. 

Al ser consultada por haber introducido ese tema en la reunión en el Legislativo, respondió que “acá está el meollo de la situación. La resolución habla sobre las buenas prácticas agrícolas, y las buenas prácticas agrícolas las saben los ingenieros agrónomos y los aplicadores”. 

Dijo además que “los aplicadores se han estado capacitando, los ingenieros agrónomos tienen un título que los hablita, así que trabajar en eso es el cuello de botella en este momento, no porque no lo conozcan, sino porque tiene que estar la responsabilidad de ellos vigente”.