Este es el atardecer que se ve desde mi casa, que se diferencia de todos los otros por el movimiento. Este, se diferencia de todo el resto, es un otoño más frío y solitario, en el que después de un horario ya no se escuchan casi ruidos de autos, ni movimiento de personas, solo se sienten los ruidos de las hojas caer, los pájaros cantar, los perros ladrar. Se dejó de escuchar la gente pasar, los autos andar a cualquier hora, algunos con música fuerte. Ahora se vive un otoño desde la ventana, escuchando ruidos de hojas y animales.