01|01|21 19:03 hs.
En el cierre de un año
especialmente difícil por
los efectos que generó la
pandemia, el intendente del distrito
de Coronel Dorrego realizó
un moderado balance respecto
al año que termina y sobre todo
abre firmes interrogantes sobre
el que comienza.
Después de haber atravesado
tiempos en la gestión con dudas
respecto a la “fecha cierta del
comienzo” de la vacunación
contra el coronavirus, el contador
Raúl Reyes dijo a La Voz del
Pueblo que “uno no sabe hasta
qué mes del año que viene vamos
a tener que estar bajo estas
mismas condiciones”.
El jefe comunal se refirió además
al modo en que se vive en
el país con determinadas restricciones.
“De todas maneras también
creo que después de tanto
tiempo -de 9 o 10 meses- en esta
situación tampoco tenemos, los
gobiernos, mucho margen de
maniobra para seguir pidiéndole
a la gente que tenga determinados
cuidados”, observó.
En este sentido puso como
ejemplo lo que ocurre con la
costa atlántica. “La gente tiene
necesidad de salir, juntarse,
pasar momentos juntos, y en
la ciudad de Buenos Aires hay
indicadores que manifiestan que
podría haber un incremento de
casos”, dijo.
Es por eso que considera que
2021 será “un año muy difícil”.
Estimó que vacunar a la población
requerirá de una logística
impresionante que los gobiernos
nacional y provincial ‘están
planificando’, después de haber
participado de reuniones donde
a los intendentes se les explicó “los trazos gruesos”.
La vacuna “tiene que conservarse
a una muy baja temperatura,
desde que se descongela hay
media hora para poder aplicarla
para que no pierda su efectividad.
En esa media hora se la
deben aplicar a cuatro personas,
hay una serie de condiciones que
son muy específicas pero que es
importante tener en cuenta para
que la población en definitiva
tenga inmunidad”, remarcó.
“No será fácil”
Reyes que espera contar con
el presupuesto aprobado, prevé
que el nuevo año llegará en un
“escenario” que no será fácil
teniendo en cuenta la situación
económica reinante y la pérdida
de puestos de trabajo “que se
cuentan de a millones, el cierre
de muchas empresas, el difícil
acceso al crédito, un mercado
interno totalmente debilitado,
el aumento permanente de precios.
Todo es un cóctel bastante
difícil”, afirmó.
El futuro cercano que advierte
Reyes también para su gestión
en la intendencia dorreguense
lo lleva a plantearse una planificación
“en un marco de cierta
coherencia”, en la que no puede
proyectar grandes obras pero si
debe garantizar una correcta
prestación de servicios.
Prolijos y prudentes
“Si una característica tenemos
es que tratamos de ser lo más
prolijos posibles en el manejo de
los recursos, lo más prudente y
no hacer locuras”, sostuvo.
En ésta misma línea aseguró
que “de ninguna manera” pondrá
en riesgo a la salud económica
y financiera del municipio.
Mencionó con ironía que se escuchan
siempre “algunas voces”
que recomiendan la compra de
bienes de capital o dar un salto
en el aumento de sueldos bajo
el argumento de que “después
la plata aparece”.
Dijo al respecto que “eso está
muy lejos de lo que nosotros pensamos
en cuanto a lo que debe
ser el manejo y administración
de un municipio”. Puntualmente
se refirió al sueldo de los trabajadores
municipales, sector del
cual afirmó que uno de sus objetivos
es que sus salarios “vayan
acompañando el incremento de
precios, que no pierdan contra la inflación”.
No obstante aclaró que “eso
tiene un límite, que es la cantidad
de recursos que tenemos”.
Además consideró que los bienes
de capital se renuevan “en la medida
de nuestras posibilidades”,
como lo ha hecho durante 2020
que pudo adquirir dos camiones,
mientras intenta acceder a un
crédito para la compra de una
motoniveladora y bienes de utilidad
para el hospital.
La temporada Puntualmente el intendente de
Coronel Dorrego resaltó el trabajo
realizado para la temporada
de verano en Marisol. “Tiene
para nosotros una importancia
superlativa, siempre dándole
mucha importancia a Marisol
y los servicios en la playa. Va
creciendo y requiere de todo
nuestro esfuerzo”, dijo.
Menor riesgo El año que termina, para Reyes,
fue “muy difícil y de mucha incertidumbre”
para la administración
pública de un municipio como el
que administra.

De todas maneras resaltó que
“se logró cuidar la salud de
nuestra población, no ponerla
en riesgo, o no aumentar los
riesgos. Pero también se logró
ir flexibilizando la situación de
manera tal de poder tener una
vida relativamente normal, o lo
más parecido a la normalidad”,
afirmó.
Talón de Aquiles
Finalmente observó un aspecto
que consideró muy importante
en el marco de la pandemia y
sobre el que los municipios no
tuvieron injerencia. “Creo que si
hay algo que quedó en el tintero
y que no dependía del municipio
fue la vuelta a clases; me parece
que ese es el gran talón de
Aquiles que tiene la pandemia”,
sostuvo.
Y agregó en el cierre que “me
parece que allí se deberían haber
hecho más esfuerzos para poder
lograr la vuelta a clases; con la
importancia que ello tiene y
con lo que implica para toda la ciudadanía”.