Tras doce asaltos vibrantes, que tuvieron en vela a muchos televidentes, el argentino empató, por decisión dividida de los jueces, con el estadounidense el pasado sábado 17 de julio en el AT & T Center de San Antonio, Texas. 

En una gran actuación, el boxeador oriundo de Isidro Casanova, perteneciente al partido de La Matanza, retuvo su corona superwelter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), mientras que el local conserva las otras tres; Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Federación internacional de Boxeo (FIB). 

Dejando atrás dos minutos de estudio y respeto, al final del primer asalto el matancero cerró mejor. En el segundo las bombas de poder de Jermell “Iron Man” Charlo hicieron daño y causaron preocupación. Sin embargo, sobre el final del tercero, Brian “El Boxi” Castaño impuso respeto y con buenas combinaciones estuvo al borde de derribarlo, pero la campana lo impidió.

Con guapeza, técnica y gran preparación física y mental supo contrarrestar el poder de su oponente. Presionando de manera constante dominó desde la tercera hasta la novena vuelta y la derecha, por encima de la guardia, impactaba en varias oportunidades sobre el rostro de su adversario de manera sólida. 

Pero el nerviosismo de los espectadores presentes en el pabellón deportivo -donde tantas veces brilló el basquetbolista bahiense Manu Ginóbili- y la cantidad de fanáticos expectantes del otro lado de la pantalla creció en la décima ronda, donde Charlo conectó potentes golpes a la cara del bonaerense. Tambaleando y caminando hacia atrás con unas piernas temblantes, sobrevivió al castigo hasta que la campana marcó el final de ese capítulo. 

En los dos últimos episodios el texano dominó las acciones ante un rival que en ningún momento dejó de intentar convertirse en el campeón unificado. La imagen final, Jermell, con muchas dudas sobre su entrega, en la esquina opuesta reconociendo la gran labor del equipo argentino integrado por Carlos Castaño (padre y entrenador), Matías Erbin (Preparador físico) y su manager Sebastián Contursi. 

Finalizado el combate, arbitrado por el panameño Héctor Afú, lo peor estaba por venir y el miedo crecía, porque las tarjetas de los jueces determinarían el veredicto. La primera mencionada por el anunciador, Jimmy Lennon Jr. fue 114-113 para Brian (Steve Weisfeld), la segunda, inentendible por donde se la analice, marcó 117-111 a favor de Charlo (Nelson Vázquez) y la tercera 114-114 (Tim Cheatham). Mientras que la puntuación extra oficial del autor de esta nota reflejó 116-112 a favor del Boxi. 

La tarjeta igualada es aceptable porque fue un enfrentamiento parejo en un deporte de apreciación, aunque quien había ganado la mayor cantidad de asaltos había sido Castaño. Pero marcar seis puntos de diferencia y ser el único de los tres en ver perdedor al argentino antes de la décima ronda deja mucho que desear.

Con este injusto fallo, Castaño a sus 31 años sumó otro empate en su récord invicto de (17-0-2, 12 KOs) y se mete en las grandes ligas del deporte de los puños. Por su parte Iron Man, con la misma edad, añadió el primer empate en su palmarés (34-1-1, 18 KOs) y dejó muchas dudas denotando nuevamente pocos recursos a la hora de salir de los aprietos.

“La pelea la gané yo, quiero la revancha inmediatamente. Me ha pegado alguna que otra mano y quedé sentido en un round, pero eso no quita que no haya ganado. Tiré mayor cantidad y le conecté grandes manos”, declaró el campeón OMB a la prensa segundos después de escuchar el empate. 

En tanto, los seguidores se quedaron con un sabor amargo porque quedó atrás esa chance de hacer historia y convertirse en el primer latino unificado, dándole paso a Saul “Canelo” Álvarez para conseguir esa meta cuando enfrente a Caleb Plant -dueño del único cinturón que le falta-. Da la impresión de que nuevamente ganó el negocio y perdió el boxeo.