13|10|21 13:24 hs.
Este jueves 14 de octubre se cumplen tres años del femicidio de Fabiana Suita, la tresarroyense de 30 años que fuera asesinada por quien era su pareja, Javier San Román. Unas horas después, el femicida confesó el crimen en la comisaría 1ra de nuestra ciudad y dejó una frase que aún retumba en los oídos de sus familiares y allegados: "me mandé una macana".
Con la causa estancada por lo intentos de la defensa de San Román de que se lo declare inimputable, desde el entorno de Fabiana organizaron una marcha para este jueves, que tendrá su concentración en la plaza San Martín a las 19 horas.
Mariana Moro, amiga de Fabiana y una de las gestoras de la manifestación, dialogó con este medio y afirmó que "hace unos días nos pusimos de acuerdo con un grupo de amigas para marchar, y más allá de que nosotros siempre la tenemos presente, queremos traer a recuerdo de la comunidad el femicidio de Fabi. Hacerlo visible para que la sociedad tresarroyense sepa que no ha habido movimientos significativos en la causa, y esto obviamente nos preocupa y nos duele".
Mariana agrega que el encuentro es también una forma de acompañar a la familia de Fabiana, "que son los que conviven a diario con el dolor. Ellos también van a estar acompañándonos", dijo, y agregó que "ojalá que esto genere algún tipo de impacto en quienes llevan adelante la causa, y que la muevan, porque pasaron tres años y todo sigue igual".
Al respecto, se pudo saber que en este tiempo se realizaron diversas pericias a Javier San Román, con las que su defensa buscó que se lo declare inimputable. Incluso el pedido llegó hasta Casación, pero finalmente se determinó que San Román está en condiciones de afrontar un juicio, por lo que la causa será elevada a esa instancia, que comenzaría el año que viene.
“Pasaron tres años y estamos como el primer día, cuando él se entregó”, lamentan desde el entorno de la víctima.
Aislada
Consultada por este medio, Mariana Moro hace un repaso de lo que fue la relación de Fabiana Suita con su femicida, quien mientras duró la relación la aisló de sus afectos. "A ella la matan un domingo y yo la había visto un miércoles. Me contó la situación que estaba viviendo, de violencia psicológica. Al principio no se daba cuenta, pero para ese entonces ya había decidido separarse y había vuelto a vivir en la casa de su mamá, donde tenía un almacén"
Agrega que "nosotras, sus amigas, no estábamos al tanto de lo que le había estado pasando en los últimos meses, porque desde el momento en que empieza a convivir con esta persona la aísla totalmente. Dejamos de verla, de juntarnos como solíamos hacer. Él era enfermo de los celos, la encerró, no la dejaba salir, le cerró las redes sociales. Incluso no dejaba que Fabiana busque a su hija al jardín. Una vez que se mudó con él ni siquiera supimos donde vivía".
Sobre ese último encuentro con su amiga, Mariana detalla que "me contó que se había separado y algunos detalles. Por dentro me asusté pero no quise angustiarla más, porque estaba atravesando la separación. Y lo siguiente que supimos fue que la había matado. Fue muy rápido, no pudimos hacer nada".
Por último, contó que "a nosotras nos tocó ir a limpiar el lugar, para que no lo tenga que hacer la mamá. Es indescriptible lo que vimos. Fue con saña. No fue una macana como dijo él. Fue algo peor".
La marcha
La convocatoria es en plaza San Martín a las 19 horas. “Esperamos el apoyo de la comunidad. Que se sensibilicen por el hecho y por los otros casos de femicidios que ocurrieron en nuestra ciudad y en general. Iremos hasta la Fiscalía de forma pacífica pidiendo que se haga Justicia. Es lo único que queremos”.