Foto: Jorge López de Ipiña

Deportes

Bicampeón de Minicross

Felipe Yané analiza un 2022 sobre un Mar y Sierras B

07|12|21 21:08 hs.

En el habitáculo de su minicross Fiat se maneja con la solvencia y seguridad de un piloto experimentado, de esos que en su campaña han alcanzado una calidad conductiva de alto nivel y donde las consagraciones fueron consecuencia de un trabajo serio, diagramado a conciencia y con una ejecución perfecta. 


Por eso, en Felipe Yané su corta edad sólo queda reflejada en su DNI o en su angelical rostro, porque en la parte deportiva lo suyo alcanza otro calibre, otra calidad, esa que el domingo rubricó con la obtención del bicampeonato en Minicross, con triunfo incluido. 

“Este logro genera mucha alegría, porque es producto del trabajo que como siempre llevamos adelante en equipo”, comenzó diciendo Felipe con sus gestos firmes pero cargados de sinceridad y realidades. 

La adquisición de experiencia, en Yané es algo que sucede día tras día; la impresión es que cada hecho o movimiento es sinónimo de aprendizaje. “Por suerte es así; quien me ayudado mucho es mi papá, principalmente, por todo lo que trabaja en el auto, que es un montón. Y la verdad que el auto anda bárbaro siempre, porque sin una buena máquina hoy en día es imposible hacer algo distinto para cualquier piloto. Por eso no me quedan más que agradecimientos a mi papá por todo lo que conoce del auto y porque me ha acortado un montón de caminos, esto que vivimos es principalmente gracias a él”, valoró de Guillermo. 

Y razones no le faltan, pero desde su bajo perfil o humildad, Felipe no quiere reconocer o valorar públicamente lo que él construye desde el volante. El domingo hubo mucho de ello porque tras clasificar séptimo aprovechó todo en serie, clasificación y final. 

“Estábamos complicado, pero fuimos buscando la manera de mejorar y llegamos a un buen punto, pero en la final se nos cayó el ritmo. Por suerte la disputa por el triunfo fue con Vivarelli, con quien somos muy amigos y nos respetamos mucho; me hizo una gran maniobra en el sobrepaso y cuando yo busqué recuperarme me respetó; por suerte salieron lindas maniobras”, afirmó con el respaldo que en el momento había expresado la multitud con los gritos y aplausos. 

En el momento de la baja de rendimiento, Felipe venía “tranquilo, porque estando adelante era campeón. Pero no estaba bien, me compliqué con un rezagado y me pasó, mérito de él; por suerte se la devolví y en esas vueltas finales dimos un lindo espectáculo”, destacó. 

Las largadas, de la serie y prefinal fueron claves para avanzar rumbo al triunfo. “Si es así, pero pensé cada maniobra porque sabía que debía sumar”, argumentó desde el perfil de piloto cerebral. 

¿Fue impensado este bicampeonato?, preguntamos, y la respuesta tardó en llegar porque la emoción se apoderó de su humanidad. “La verdad, esto es de mi papá; él es el que trabaja, la gente que lo conoce y la que va al taller sabe las horas que le dedica al motor, al auto. El es el principal por la garra que le pone para que el auto anda; más que cualquier mérito mío” dijo con orgullo el piloto que en pista hace que el trabajo de su padre se luzca, y que en el año ganó 4 carreras, una cifra conmovedora. ”Uno le pone lo mejor, nunca se termina de aprender, pero hay mérito de todos, mío, de mi padre, del equipo. No pensaba que pudiera ganar tanto este año porque hay máquinas y pilotos muy buenos, de alto nivel; la categoría está muy competitiva”, razonó. 

Con dos títulos en dos años, da la sensación que Felipe podría mirar un horizonte distinto. “Minicross me encanta, hay que manejar mucho acá; la intención es hacer el Mar y Sierras B con el cual mi papá fue bicampeón. La idea es actualizarlo y ver si podemos armarlo para arrancar el 2022”, anticipó. 

El tiempo de la charla se evaporaba, el llamado para la entrega de premios anticipó el saludo final. “Puedo ser reiterativo pero quiero agradecerle nuevamente a mi papá, a los chicos del equipo y a toda la gente que colabora para que el auto tenga este nivel”, agradeció emocionado Felipe Yané, momentos antes del gran festejo junto a un gran grupo que más que como equipo, celebró como una familia…