“Nunca es uno más, esa es la verdad. Este año fue súper peleado; en las dos primeras rondas yo jugué menos que ella (Emilia Ruppel), pero en la tercera ronda logré revertir el resultado (con un gross de 78 golpes pasó de estar 4 abajo a quedar 3 arriba); y en la última vuelta ambas estuvimos un poco erráticas, propio de estar peleando un campeonato que nunca es uno más”, confesó María Valeria Vassolo, nuevamente la campeona de nuestro golf con 4 golpes de ventaja. 

La definición fue dominada por la presión, se notó en los golpes, en los tiros al hoyo; el peso del Anual multiplicó su valor. El hoyo 71 fue movilizante para ambas, hasta traumático por los cortos putt que ambas erraron. “Sí, fue una demostración de nervios; a mí me cuesta manejar esa tensión, es la verdad. A esta última vuelta no la jugué relajada, es la verdad; el sábado sí pude hacerlo y por eso el score que marqué y el golf que pude jugar. Hoy fue todo lo contrario, pero Emilia tampoco”, reconoció. 

La primera salida del hoyo 72 fue de Ruppel, y su vuelo parecía perfecto hasta que terminó siendo larga y tras pegar en la escarpada quedó injugable, pero mientras volaba, seguramente la presión para Valeria iba en aumento. “Sin dudas porque iba bárbara, cuando jugué la mía lo único que quería era que quedara arriba del green como para hacer un par” admitió; pero en ese tiro Valeria sacó su estirpe de campeona, de total entereza y calidad, “algo similar pasó en el 11 donde perdí mi bola de salida, así que tuve que tirar nuevamente el drive y con esa segunda pelota hice par, lo cual no me desestabilizó mucho en un momento que venía arriba. Pero la presión de repetir el drive en ese hoyo 11, es un duro desafío”, destacó. 

El Torneo Anual volvió al formato de 72 hoyos, y para la monarca es algo que “premia a la regularidad, algo importantísimo. Es el Campeonato del Club, yo creo que tiene que seguir siendo a 72 hoyos; es bárbaro”, afirmó. 

 

Y yendo a los números y experiencia propia, le permitió la recuperación. “Por supuesto, es así”, aceptó, y amplió sobre la diversidad de condiciones de un fin de semana al otro. “El primer día tuvimos el factor lluvia, aunque calor hizo todos los días. Y los últimos 36 hoyos costó jugar porque la cancha estaba muy seca, muy corredora; en esas condiciones se hace difícil manejar los piques y pararla en el green”.

El primer putt del hoyo 72, aunque Ruppel sufriera los sobresaltos ya contados que le abrieron un panorama tranquilizador a Vassolo, la exigencia del golpe era extrema. “Estaba totalmente en bajada, lo único que pedía era no pasarme mucho para hacer un par porque no quería despedirme con un bogey, quería cerrar el torneo con un par”, confesó. 

Para Valeria, el 2022 fue un año particular porque no jugó mucho, entonces la valoración de este Anual puede ser especial. “Jugué y practiqué poco con respecto a otros años; no estaba en juego, por lo que el esfuerzo fue mayor. En las últimas 3 semanas practiqué mucho, esta última semana entrené bastante el putt bajo el terrible calor porque debía mejorar todo; por suerte pudimos mejorarlo y creo que el putt, sumado a que me focalicé en pelear el campeonato, en no dar nunca por perdido el campeonato, me hizo jugar también bien la cancha. No me dí por vencida y acá estamos. La última ronda fue especial, casi como un match, pero es difícil no equivocarse cuando la presión aflora”, añadió. 

Conseguir el título N°12 verdaderamente no es poco. “No, para nada”, dijo con una sonrisa. “Ya me puedo retirar tranquila; estoy muy feliz”, confesó mientras sus ojos rubricaban sus dichos y su cuerpo emanaba cierto desahogo tras haber alcanzado el gran objetivo. “Han sido muchas cosas, en este momento y en esta charla me estoy relajando, me estoy dando cuenta de lo conseguido y lo estoy disfrutando porque atrás de todo hay mucho trabajo y dedicación. Sólo me queda agradecerle a mi familia, que siempre está pendiente, y a todos los que me apoyaron en todo momento”, destacó Valeria XII, “la Reina del Tres Arroyos Golf Club”.