Carácter, determinación y solidez son los adjetivos que marcan y realzan a El Nacional, el único puntero de la Primera División de la Liga Regional Tresarroyense de Fútbol, que en la nublada tarde de domingo derrotó en su estadio a Once Corazones por 2 a 1 y gracias a los resultados de la fecha, hoy se encuentra con cuatro puntos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor.
El partido empezó mejor de lo que Fabián Sánchez podría haber planificado, porque desde el pitazo inicial el Decano tomó la pelota y se paró en campo rival. Tan sólo pasaron ocho minutos para que llegue el primer grito de la tarde. Oscar Otreras dominó contra su banco, empujó por la banda derecha y con un golpe de vista ubicó a Vannieuwenhoven que trazó una diagonal.
El goleador de la tarde tiró un centro que se fue cerrando, tanto que con la ayuda del viento la pelota no bajó como calculaba Alberca y se metió en el ángulo del segundo palo para concretar el 1-0.
Para la visita fue una cachetada que lo movilizó, el mediocampo se activó por las bandas y en un desborde por la izquierda Rivera quedó sólo, dominó en el área y giró para sacar un furioso remate que dejó sin respuesta a Serén.
Para la visita fue una cachetada que lo movilizó, el mediocampo se activó por las bandas y en un desborde por la izquierda Rivera quedó sólo, dominó en el área y giró para sacar un furioso remate que dejó sin respuesta a Serén.
Con justicia el encuentro estaba en pardas y prometía mucho.
Lo cierto es que el partido no terminó de armarse, hubo mucho roce y fricción en la media cancha. El aurinegro intentó desplegar por las bandas pero encontró resistencia, por su lado, el elenco de Indio Rico quiso ser directo pero encontró en Ascensión una muralla.
Lo cierto es que el partido no terminó de armarse, hubo mucho roce y fricción en la media cancha. El aurinegro intentó desplegar por las bandas pero encontró resistencia, por su lado, el elenco de Indio Rico quiso ser directo pero encontró en Ascensión una muralla.
Una ocasión de Vannieuwenhoven y otra de Ocampo fueron lo más destacado después de los goles. Para la estadística El Nacional era superior, y con dicho envión se fueron al descanso.
Pero lo que parecía un panorama favorable a los de Sánchez, fueron los de Ariel Alberca los que salieron a imponer condiciones. En tan solo 15 minutos crearon dos situaciones que podrían haber cambiado todo. Primero Monges exigió a un sólido Serén y posteriormente el Nº 1 le sacó un peligroso tiro libre a Rivera.
Pero lo que parecía un panorama favorable a los de Sánchez, fueron los de Ariel Alberca los que salieron a imponer condiciones. En tan solo 15 minutos crearon dos situaciones que podrían haber cambiado todo. Primero Monges exigió a un sólido Serén y posteriormente el Nº 1 le sacó un peligroso tiro libre a Rivera.
De ahí en más todo volvió al poder aurinegro. Recuperó la pelota con Caballero e Hidalgo y encontró la ventaja nuevamente en Otreras. Después de una jugada individual su remate dio en el palo, Inés tomó el rebote y envió un centro para que el solitario goleador domine, apunte y ejecute lo que a posteriori sería el resultado final.
Once intentó con más voluntad que fútbol, y podría haber encontrado el consuelo del empate con remates de lejos de Regalado y Sabatini, pero otra vez el arquero de Tandil mostró su jerarquía.
El Nacional volvió a su cancha con un triunfazo, por el rival y la posibilidad que no dejó pasar de escaparse en la punta. Si algo le faltaba para terminar de ponerse la ropa de candidato era ganarle al campeón y lo hizo con autoridad por 2 a 1..
El Nacional volvió a su cancha con un triunfazo, por el rival y la posibilidad que no dejó pasar de escaparse en la punta. Si algo le faltaba para terminar de ponerse la ropa de candidato era ganarle al campeón y lo hizo con autoridad por 2 a 1..