Profesionales reclamaron por el nuevo sistema de Catastro

En la multitudinaria y extensa reunión estuvieron referentes de arquitectos, martilleros, escribanos y técnicos, quienes ante los concejales pusieron sobre la mesa las dificultades observadas luego de la digitalización de los expedientes. La reunión se concretó luego de una nota que las entidades enviaron al Concejo para abordar este tema, tras lo cual fueron convocadas por la Comisión de Obras Públicas.

Luego del encuentro, José Duca, del Colegio de Arquitectos, valoró la unificación de posturas de las distintas entidades de profesionales de la ciudad con el propósito de hacer referencia a los planteos.

«Esta reunión condujo a algo muy importante, que fue el hecho de mancomunar los distintos colegios de profesionales que realizan trámites con el municipio, fundamentalmente, con Obras Particulares y Políticas Tributarias», expresó el especialista. 

El saldo del encuentro, según manifestó Duca, arrojó la conformación de una mesa de trabajo «para tratar de resolver estos inconvenientes que surgen cuando tenemos que presentar un legajo de obra o cuando el escribano debe hacer una traslación de dominio».

El representante del Colegio de Arquitectos mencionó que, previo al cambio de sistema impulsado en Catastro, «el sistema hace dos años era manual y funcionaba bastante bien. No teníamos quejas ni objeciones». 

En este sentido, el profesional aseguró que los colegios de profesionales no se oponen a la digitalización de Catastro, aunque afirmó: «Tendría que haber salido a la calle una vez que haya estado todo probado. Eso no está pasando».
Posteriormente, Duca dijo: «Palabras del director de Políticas Tributarias (Ariel Sánchez), debe hacer el 30 ó 40 por ciento de las planchetas digitalizadas. La gravedad de esto es que el sistema de planchetas manuales se trasladó a un depósito. Y eso es la base tributaria del municipio». 

«Si se pierde el Catastro, se pierde la base tributaria sobre lo cual tributa la gente. El tema es delicado», puntualizó. 

A su vez, puso relieve otra consecuencia de los cambios impulsados. «Con el anterior sistema, los profesionales de Catastro nos atendían directamente. Teníamos un trato rutinario y coloquial. Podíamos resolver cuestiones en minutos. Ahora no podemos recabar ningún dato. Uno llega al mostrador de Políticas Tributarias y no atienden los profesionales. La gente que te atiende es muy amable, pero desconoce de lo que hablamos».