Agrario, campeón de la Liguilla

Y, como sucedió durante gran parte del año, el Rojiblanco hizo todo bien. El equipo de Alfonsín dominó un encuentro parejo, fue eficaz y se llevó un importantísimo triunfo ante un rival de fuste, que no pudo darse el gusto de levantar el título a pesar de haber hecho una gran campaña. 

El primer tiempo fue equilibrado. Ambos equipos se mostraron erráticos, nerviosos e imprecisos por momentos. Así y todo quien se vio “mejor” fue la visita que a los 11 minutos logró ponerse en ventaja a través de Piñeiro.
A pesar del gol, el trámite continuó siendo parejo. El local buscó ser punzante y logró llegar al empate gracias a su goleador, Francisco Aríngoli. 

Los últimos minutos de la primera mitad continuaron por la misma senda: fueron trabados y peleados, sobre todo en la mitad de la cancha. 

En el segundo tiempo Agrario no le dio respiro a su rival y a los 40 segundos logró ponerse nuevamente en ventaja ya que su goleador, Lionel Tries, estampó el 1-2. Tenaglia intentó dar un golpe de timón rápido y movió el banco de suplentes. 

El trámite no varió y la visita aprovechó nuevamente las que tuvo para volver a convertir: a los 22, Tries tomó el balón y estampó un verdadero golazo para estirar la diferencia. Enseguida, Tapón Morán cabeceó un balón, éste dio en el travesaño y en el rebote Tirone la metió adentro marcando el descuento. 

Los últimos 20 minutos tuvieron todos los condimentos de un partido de estas características. Tirone sufrió una lesión y el juego se detuvo por 5 minutos, lo que provocó que, sobre el final, Espinosa adicionara 7 minutos. 

Su reemplazo, Padín, ingresó para convertirse en héroe ya que sacó 3 balones que podrían haber sido el empate del local.
Así, pasaron los minutos y Agrario terminó festejando un triunfo que fue justo y que lo depositó, nuevamente, en una final por el ascenso.