Controversia y cuarto intermedio en la sesión por Julián Lamberti

La puesta de relieve del episodio dado el jueves por tarde encontró el apoyo del bloque de Todos, que propuso que la sesión de ayer pase a un cuarto intermedio para el próximo lunes y que quede pendiente hasta esa jornada, en principio, el tratamiento legislativo de la designación de Lamberti como delegado de Claromecó.

La moción peronista, más allá del intento que ensayó el vecinalismo para que se vote el nombramiento del actual director de Turismo para conducir los destinos de la localidad, fue aprobada por mayoría.

En principio, el tema se tratará el lunes. Sin embargo, si el jefe de Gabinete no pide disculpas o aclara públicamente los supuestos improperios que, según se expresó desde Juntos por el Cambio, le dijo a los concejales del macrismo, la sesión corre peligro de realizarse al considerar que los bloques de la oposición se mantendrán firmes en la postura tomada ayer. 

Ante lo ocurrido en la sesión de ayer, Claromecó continúa sin formalizar la designación de su delegado. Y desde el pasado jueves, cuando el cuerpo deliberativo rechazó el nombramiento de Guillermo Wilson, quien estaba en el cargo desde hacía 58 días pero sin el aval del Concejo porque la propuesta no había llegado al recinto en los tiempos correspondientes para su tratamiento, el puesto se encuentra bajo el interinato de Diego Parravicini. 

La propuesta elevada el pasado lunes por el Ejecutivo para que el cuerpo deliberativo vote la designación de Lamberti iba a ser aprobada en la sesión de ayer. Si bien el peronismo no iba a acompañar la iniciativa, el expediente contaba con el aval de Juntos por el Cambio y, lógicamente, del vecinalismo. 

No obstante, la votación no llegó a darse y el tema pasó a un segundo plano. Fue cuando la oposición le volvió a marcar la cancha al Ejecutivo, que, una vez más, sintió el impacto de otro certero golpe lanzado desde Juntos por el Cambio y el bloque de Todos. 

“Dejen de robar la plata” 

Lo más jugoso de la jornada comenzó cuando, en forma previa al tratamiento del único punto de la sesión, el presidente de Juntos por el Cambio Enrique Groenenberg pidió la palabra para poner de relieve una situación que vivió en la tarde del jueves con el jefe de Gabinete Hugo Fernández. 

En su relato, contó cómo se dio el episodio que vivió con la segunda máxima autoridad del Ejecutivo. «Fue ayer -por el jueves- cuando yo mantenía una conversación telefónica con la concejala Claudia Cittadino en torno a las negociaciones por la designación del nuevo director del Ente Descentralizado de Claromecó», expresó el edil en el comienzo de su descripción de los hechos.

En la continuidad de su narración, Groenenberg manifestó: «La conversación era de alto nivel. Era sobre algunos datos que habíamos pedido sobre Lamberti. En una interrupción a través del teléfono de la concejala escuché la voz del jefe de Gabinete Hugo Fernández, quien nos agravió. Nos dijo: ‘Delincuentes, dejen de robar la plata. La gente los está puteando. Delincuentes'», expresó. 

Y Groenenberg, en su relato, afirmó: «La comunicación con la concejala Cittadino se cortó, pero ella, posteriormente, pidió las disculpas del caso. El hecho es que -Hugo Fernández- lo dijo en plural y consideré que nos involucró a los 18 concejales de este cuerpo».

«Mi bloque repudió lo que sucedió. Está con mucha bronca. Me siento en la obligación de comunicárselo a todos los concejales para que sepan los conceptos que tiene el jefe de Gabinete hacia nuestra figura. El agravio es grande y hay que tomar una postura», afirmó Groenenberg, visiblemente molesto por la situación que le tocó vivir. 

Garate, presidente del bloque de Todos, no dejó pasar por alto lo escuchado por su par de Juntos por el Cambio. «Lo que expuso el concejal Groenenberg involucra a 18 concejales y, además, a la figura institucional del Concejo Deliberante. Mi abuela decía que cuando ‘Juan habla de Pedro, más habla de Juan que de Pedro’. Nosotros repudiamos los dichos del jefe de Gabinete, que, creemos, debe aclararlos», sostuvo el peronista. 

«Quiero pensar que fue un exabrupto, algo del momento y propio de las presiones de sus funciones. O si, realmente, piensa eso. Es una descalificación grosera, institucionalmente hablando. El intendente y todos sus secretarios merecen el debido respeto, algo que desde este Concejo, más allá de las diferencias que puedan existir, siempre existió. Ese respeto es el mismo que nosotros exigimos de parte del jefe de Gabinete», sostuvo.

Garate, en tanto, calificó de un hecho institucional «demasiado grave» y pidió que Hugo Fernández aclare los dichos públicamente, caso contrario, que acuda al Salón Blanco. «Me gustaría que antes de que comience la sesión, el lunes, el jefe de Gabinete venga y nos aclare a los 18 concejales en qué funda sus acusaciones”, propuso el concejal.

En la única intervención que se hizo sobre el tema, la presidenta del bloque vecinalista, Claudia Cittadino, pidió votar el tema que motivó la sesión de ayer, pero la iniciativa sólo encontró el rechazo de la oposición. 

Los dichos del jefe de Gabinete, respondió Garate, “se dieron justamente en el marco del tratamiento del tema por el que se convocó a esta sesión”.

La puesta a consideración del pase a cuarto intermedio de la sesión de ayer -en principio para este lunes- entregó una postal pocas veces vista: el bloque de Todos y de Juntos por el Cambio cerrando la grieta y en una misma sintonía.