Por años no pagó las tasas, el municipio ahora le hace juicio

Aseguró que pidiendo prórroga durante gobiernos anteriores pudo evitar el reclamo del municipio, cuestión que cambió a partir de los primeros años de gestión del actual jefe comunal, Miguel Angel Gargaglione, quien –por ordenanza- modificó la situación de quienes compran terrenos en el balneario y no construyen pasado determinado período de tiempo. 

Fue entonces que la normativa comenzó a generar un recargo para los propietarios de lotes no edificados, con la intención de motorizar el perfil turístico de ese punto del distrito. Hasta entonces los terrenos edificados y no edificados pagaban las mismas sanciones por incumplir el pago de las tasas. 

En una visita a La Voz del Pueblo, Darroquy explicó que compró su lote en balneario San Cayetano durante 1985; y que nunca supo del cambio de ordenanza que impulsó Gargaglione. “Me viene al cobro una sanción económica porque han modificado la ordenanza impositiva”, dijo el sancayetanense a quien le exigen el pago de una deuda que supera los 521 mil pesos por impuestos impagos comprendidos entre los años 2002 y 2020.

Con intención de pagarla se acogió a los beneficios de un artículo de la norma y a partir de allí la deuda pendiente es entre los años 2013 y 2020, para la que se le armó un plan de doce cuotas que oscilan entre los 31 y 38 mil pesos mensuales. 

Asimismo se le agregó la deuda contraída entre 2020 y 2021, la cual debe pagar en doce cuotas superiores a los 9 mil pesos, también en el correr de este año. 

Después de haber pedido que se le condonara la deuda, el municipio ratificó el curso de la ordenanza y le exigió el pago que debe abonarse en el transcurso de los doce meses del año en curso.

A pesar de reconocer las notificaciones del municipio por la deuda, afirma que desconocía el cambio de la normativa local; e independientemente de esa situación contó que no pudo cumplir con los pagos a raíz de sufrir –durante los años en los que no cumplió con las obligaciones- los efectos de “la hiperinflación, la seca con los animales, las colmenas y temas sucesorios”. 

Afirmó que todo ello conspiró contra el pago de sus impuestos.
En su presentación durante la sesión del legislativo afirmó sentirse ‘perseguido y damnificado’, y aseguró que no podrá cumplir con el pago que le exige el municipio porque es “jubilado”. 

“No sabía que estaba modificada la ordenanza, estaba ajeno y atenido al contrato original (que no preveía pago diferencial de impuestos en caso de no construir)”, dijo el ex propietario de una “pequeña explotación agropecuaria” de 68 años de edad, quien quedó a la espera de una eventual decisión que pueda tomar el gobierno municipal después de su exposición en el Concejo Deliberante, ocasión en la que cuestionó la determinación del intendente Miguel Gargaglione.