El 29 de octubre de 2022 la vecina orensana Elsa Hut (73), fue hallada en grave estado de salud en una de las banquinas de un camino vecinal cercano a la delegación tresarroyense. Había sido golpeada con furia y abandonada a pocos metros del asfalto. Fueron los primeros instantes de uno de los casos más enigmáticos y violentos de la historia criminal contemporánea tresarroyense; donde en principio se creyó que había sido atropellada, aunque esa teoría se licuó con la ausencia de pruebas tras la realización de pericias accidentológicas y mecánicas al auto en el que se movía esa noche el único sospechoso que tiene la causa.

Es que si, 24 horas más tarde del hallazgo de la jubilada, el imputado que tiene la causa por “homicidio en grado de tentativa y abandono de persona en concurso real”, no se hubiera entregado voluntariamente a la policía, difícilmente se habrían podido sumar las pruebas logradas posteriormente por la Fiscalía y aspirarse hoy a obtener Justicia.

Ya que, sin la declaración espontánea de Gonzalo Ullúa (23), un joven necochense con distintos problemas de adicciones y padre de una criatura concebida con una joven nativa de esa localidad, cuesta imaginarse que haya sido posible llegar hasta los elementos con los que en la actualidad el fiscal Gabriel Lopazzo y, posteriormente, la Cámara de Apelación en lo Penal bahiense, confirmaron la prisión preventiva con la que se espera que llegue a juicio oral en 2024. Entre ellos, la propia declaración del acusado, los tiempos en los que estuvo ausente durante una reunión con amigos y un mensaje de texto a su jefe en el lavadero de autos donde trabajaba, en el que mencionó que se había drogado, emborrachado “y cometido un error”, antes de borrar las aplicaciones de WhatsApp e Instagram de su teléfono celular.

“Mi mamá ha tenido una recuperación milagrosa desde cómo llegó al hospital (en octubre de 2022). Ella se encuentra bien, se maneja por sus propios medios en todo lo que es la actividad de su casa y lo que son sus propias necesidades. En eso ya tiene total autonomía. Obviamente se maneja con un bastón de apoyo, no sé por cuánto tiempo más”, le dijo uno de sus hijos, Fabricio Doladé, a LA VOZ DEL PUEBLO en un contacto telefónico a un año del misterioso episodio sufrido por su madre.

Al respecto, Doladé aseguró que aguarda esperanzado el desarrollo del juicio oral en el transcurso de 2024, “estamos esperando el juicio para el año que viene que, si todo sale bien, será por abril o mayo, teniendo en cuenta los tiempos de la Justicia de este país”, comentó.

Pero, a todo esto ¿Qué dice Elsa Hut? “Ella declaró hace unos meses atrás y lo que dijo está bajo secreto de sumario. En principio estamos conformes en cuanto al accionar de la Justicia. Se movieron muy rápido e hicieron todo lo humanamente posible como para llevar adelante la investigación. Sabemos y, ella misma lo declaró, que hay otras personas involucradas, pero no podemos decir mucho más. Más adelante te digo si estamos conformes al 100 por ciento. Confiamos en que la investigación avance en esta teoría acerca de que hay más involucrados”, reconoció, “ella está lúcida, tiene algunas lagunas, que son algo normal después de semejante golpiza, pero el relato que hace acerca de lo que sucedió es siempre el mismo”, agregó.

Sin embargo, a pesar de la recuperación que evidenció Elsa Hut en los meses siguientes, nada volvió a ser lo mismo para su familia.

“Mis padres se mudaron a Tres Arroyos por una cercanía con sus hijos, nietos o estar a mano de algún centro asistencial, como así también de la Fiscalía. La verdad es que a nosotros nos cambió la vida un 100 por ciento”, reconoció.

Mientras tanto, en Orense, el desafío pasa por filtrar los comentarios infundados de las informaciones que puedan llegar a configurar una prueba válida para la Justicia, “en el pueblo en sí, como todo pueblo chico, circulan comentarios de todo tipo, pero tenemos que dar con pruebas contundentes antes de ver cómo se avanza. Mientras tanto, tenemos que mantener la calma y la paciencia de los hechos judiciales para ver cómo se va a resolver”, indicó y, antes de despedirse, anheló que no se repitan hechos como el que tuvo que vivir su madre, “queremos agradecer a todos los que están pendientes de lo que pasa con esta causa, como así también a la Justicia que se ocupa de todo siempre. Lo importante acá es lograr que estos hechos no se naturalicen y que la gente piense que es lo normal que pase esto, menos con gente mayor”, concluyó.