Voces para ser escuchadas

Sofía Rodriguez y Ramiro Damboriana estudiaron en el Instituto de Formación Docente N°167 y obtuvieron el título de locutor nacional integral de radio y televisión. Sofía se recibió en diciembre y en el transcurso del año rendirá el examen ante María Ester Sánchez del ISER para recibir la matrícula. Ramiro se recibió en febrero de 2014 y en noviembre de ese año la profesora antes mencionada le tomó el habilitante.

La locutora comienza contando que «si bien es difícil entrar en una radio, en el último año de la carrera contamos con el apoyo de Luciano López Echegoyen que tenía un programa de radio en Onda Uno FM 103.9 «A calzón quitado» que nos permitió hacer las prácticas. Si bien la carrera es excelente, trabajar en una radio, estar en el aire te ayuda mucho más. Fui con una compañera hasta diciembre de este año. Hace unos cinco meses Roberto Sarlangue de la FM 91.5 me dio la oportunidad de hacer reemplazos a la mañana y quedé fija».

La joven reconoció que es muy difícil ingresar en el ámbito laboral porque hay un estereotipo de locutor que son las voces más conocidas y a «los nuevos» los llaman para algunas «cositas más chiquitas». Hay recibidos alrededor de 30 o 40 locutores.

Ramiro -después de terminar la carrera- tuvo las mismas dificultades descriptas por su compañera al momento de conseguir trabajo. «En Tres Arroyos hay mucha gente idónea con muchos años de profesión, pero nosotros estudiamos tres años para ser locutores por lo que sentimos que la carrera no está valorada. Ahora las voces en off de los programas de televisión comenzaron a aparecer frente a cámara y a tener más visibilidad. Conduje eventos como actos de colegio, eventos privados, entrega de premios», explicó.

Sofía agrega que «es una profesión que puede desarrollarse mucho más, incluso en muchos eventos las conducciones las hacen los mismos docentes, o el director de la institución… Me pregunto ¿para qué estudiamos? Si bien desde el principio sabemos que es difícil vivir de esta profesión que no está valorada».

Fiesta del Trigo

Para el locutor es «muy importante el reconocimiento, brindar la posibilidad de participar de eventos importantes como la Fiesta del Trigo es parte de eso. Las voces que aparecen en la radio pueden hacerse visibles en cualquier escenario del distrito porque estamos muy bien preparados para eso. Los conductores que lo hacen hoy en día son muy buenos, no hablamos en desmedro de ellos, sólo pedimos una oportunidad más allá de lo económico, sino que Tres Arroyos sepa que existen otras voces y que estudiamos mucho para hacer un excelente trabajo».

Para Sofía es «lógico lo que se está pidiendo, si bien Karina (Arias) y Eduardo (Manriquez) hacen un trabajo excelente son apasionados por lo que hacen y dedican sus vidas a la profesión… Pero pensar en traer a Andrea Frigerio o Teté Coustarot es pensar en aportar glamour… Pero estamos nosotros, si bien no tengo el físico de Andrea Frigerio, pero la contratan a ella para hacer lo que yo estudié. No digo que no animen la fiesta, pero la locución es otra cosa, se puede pensar en nosotros dos como en cualquiera de los egresados».

Señalaron como positiva la dinámica de trabajo de locutores en las «Doce horas solidarias» del Hospital Pirovano en la que de a pares, van rotando y cubren la locución de toda la jornada.

Sofía explica que»en un evento tan largo como la Fiesta del Trigo es conveniente cambiar las voces, la gente se cansa de escuchar siempre al mismo».

Agrega que»en la carrera nos enseñaron a tener dinámica, usar matices, conocer cuándo y cómo cambiar las voces. Karina Arias es una genia enseñando y saliendo de cualquier eventual situación, porque hay que pensar que el locutor es el responsable de mantener el interés, motivar. Si el público o la audiencia se aburren es porque no estamos haciendo bien el trabajo, nuestro rol es muy amplio».

Sofía está convencida que podrían perfectamente ser parte del grupo de locutores de la Fiesta del Trigo, incluso aporta alguna idea: «Lo podríamos hacer en parejas, en distintos horarios, si nos convocan somos muchos que querríamos participar. Además hay tantos espectáculos locales que se podrían incorporar y nosotros conducirlos. Pienso que actualmente hay muy buenos profesionales, pero queremos ser reconocidos por el estudio que tenemos, sabemos defendernos y tanto desde los estamentos gubernamentales oficiales como desde el ámbito privado queremos ser reconocidos».