Algo anda mal

Señora directora:

Al cabo del día, uno se topa con muchas cosas extrañas. Algunas son inexplicables, de otras se duda sin saber si son o no verdad, de muchas sospechamos que son meros pretextos. Veamos…

Leemos en algún portal que la vicepresidente de la nación considera que el consumo de leche es casi equiparable al consumo de un bien suntuario. E íntimamente rogamos que sea una noticia falsa, aunque parece que no.

Los jubilados y pensionados de IPS nos enteramos de que este mes cobraremos menos que el mes anterior porque «no tuvieron tiempo de cargar el adelanto» o algo así. Imposible creerlo, además de que nos ofenden pensando que todos somos tan inocentes como para aceptar cualquier verdura, como dicen los pibes.

Me llama la atención la poca cantidad de gente que hay en una farmacia que atiende PAMI (sabido es que no todas lo hacen) y lo comento con la farmacéutica. Ella me confiesa que desde que mucha gente ha perdido el derecho a recibir algunos medicamentos con el 100% de bonificación (no por ser ricos, sino por apenas superar el límite de pobreza) especulan respecto de qué medicamento comprar, llegando incluso a disminuir la dosis prescripta o, en el peor de los casos, abandonando la medicación.

Llegan fondos para escuelas, que se administran localmente, y sigue habiendo instituciones que deben suspender las clases cuando llueve, mientras se gastan grandes sumas en dársenas y otros cuasi lujos.

Pronto estaremos frente a nuevas elecciones. No sé a ustedes, pero a mí me encantaría tener la posibilidad de elegir a los mejores, y no hacer ta te ti entre el autoritarismo, el populismo, o el que roba menos, o el que «roba, pero hace», por mencionar solo algunas de las tristes opciones que hasta ahora vemos. Si esto no surge, terminaré  pensando, como tantas veces, que votar en blanco es mi triste opción.

Alicia Hurtado