Un día sin playa

Por primera vez en febrero, las condiciones del tiempo no se aliaron a las expectativas previstas por los turistas que arribaron a la localidad con el fin de disfrutar del principal atractivo natural que tiene la localidad. 

A pesar de eso, y como era de esperar, el balneario recibió a una gran cantidad de visitantes, de los cuales muchos fueron pescadores y acompañantes que serán parte de la fiesta de Las 24 Horas. 

Además, llegaron aquellos que utilizan este fin de semana largo a modo de minivacaciones, lo que originó que la disponibilidad en materia de alojamiento (en sus distintas modalidades) ya se haya completado.

El escenario para disfrutar de la playa estuvo lejos de ser el ideal. 

Durante la mañana se sintió un regular viento del sur, y pesar de que el cielo se despejó durante la tarde, la temperatura no fue la misma que se registró en el transcurso de febrero. 

Sólo unos pocos valientes se animaron a estar en la playa, la cual estuvo prácticamente desierta.

Los que sí disfrutaron a pleno de las condiciones dadas fueron los amantes del kitesurf, quienes aprovecharon al máximo de las óptimas condiciones que se dieron para desarrollar este deporte.