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El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires informó a LA VOZ DEL PUEBLO que se arbitraron los medios para hacerle llegar la dosis de la vacuna antirrábica necesaria a la familia de Tiago Ladislao González Jefimowicz desde la Dirección de Zoonosis Urbana con sede en Avellaneda.
Además informaron que la Dirección de Regiones Sanitarias realiza el pedido de la vacuna antirrábica en la Dirección de Zoonosis provincial en Avellaneda.
La misma fuente aseguró que ese centro enviará la vacuna antirrábica a Tiago Ladislao González Jefimowicz.
Ante la consulta de este diario por los motivos que generan faltantes en los stocks de la mencionada vacuna, la fuente de Salud respondió que “el Ministerio reconoce que existe escasez de esa vacuna en toda la provincia, hay demoras en la distribución a nivel regional algo que afecta a todo el país”, finalizó.
Ante la consulta de este diario por los motivos que generan faltantes en los stocks de la mencionada vacuna, la fuente de Salud respondió que “el Ministerio reconoce que existe escasez de esa vacuna en toda la provincia, hay demoras en la distribución a nivel regional algo que afecta a todo el país”, finalizó.
“Sin stock”
La secretaria de Salud y Prevención de la Municipalidad de Tres Arroyos, Isabel Tarchinale habló con LA VOZ DEL PUEBLO acerca de un nuevo mecanismo para obtener la vacuna antirrábica que consideró “muy costoso y no asegura para nada hacer stock”.
La funcionaria aseguró que el problema con la vacuna antirrábica es que “no hay, no hubo y no va a haber en ningún lado”.
En tal sentido agregó que “no había en el país y en toda la Región 1 –que son 15 municipios- nos fuimos gastando el stock hasta que se agotó. El primer reclamo es justamente a las autoridades de la Región, de allí al Ministerio de Salud provincial –que contestaban que no tenían- y reclamaban a Nación que tampoco tenía. Toda la escalera se había vaciado de stock”.
Tarchinale sintetizó la cadena de envíos, “Ministerio de Nación -sin stock- era la que debía proveer a las provincias, de allí a cada Región Sanitaria y éstas a los municipios, una situación desastrosa”.
En tal sentido agregó que “no había en el país y en toda la Región 1 –que son 15 municipios- nos fuimos gastando el stock hasta que se agotó. El primer reclamo es justamente a las autoridades de la Región, de allí al Ministerio de Salud provincial –que contestaban que no tenían- y reclamaban a Nación que tampoco tenía. Toda la escalera se había vaciado de stock”.
Tarchinale sintetizó la cadena de envíos, “Ministerio de Nación -sin stock- era la que debía proveer a las provincias, de allí a cada Región Sanitaria y éstas a los municipios, una situación desastrosa”.
Copia del protocolo, distribuido en los CAPS para gestionar la vacuna
La doctora fue contundente al apreciar que “no contar con vacunas que previenen enfermedades graves como es la rabia es de suma gravedad, algo que no tendría que acontecer y menos a nivel del Ministerio de Salud de este país y de cualquier otro”.
Tarchinale se refirió a escritos y declaraciones públicas de funcionarios de salud nacionales, de quienes dijo que “depositan la culpa en laboratorios externos”. Y también dijo que “en esas notas los máximos responsables de salud especifican que lo que bajó fue la producción desde un laboratorio internacional, por lo que el distribuidor tiene menos y por ende mucho menos dosis para distribuir”.
Producida en el país
Tarchinale explicó que hace un tiempo se fabricaba en el país -y era la que se utilizaba- “la vieja vacuna de tejido nervioso Fuenzalida-Palacios o CRL”
En este sentido anunció que “desde ayer se cuenta con esta vacuna porque empezaron a fabricarla otra vez. Hoy haciendo toda una recorrida encontré que Zoonosis de Avellaneda recibió ayer desde el laboratorio que fabrica la Fuenzalida-Palacios”.
En este sentido anunció que “desde ayer se cuenta con esta vacuna porque empezaron a fabricarla otra vez. Hoy haciendo toda una recorrida encontré que Zoonosis de Avellaneda recibió ayer desde el laboratorio que fabrica la Fuenzalida-Palacios”.
La funcionaria municipal de salud describió la situación actual y dijo “no vamos a tener stock como antes y cuando aparecía un paciente que la necesitaba se la podíamos aplicar, esto ahora no pasa. Tenemos que hacer un trámite, llenar una planilla sencilla de fácil acceso de datos que la completa el médico que recibe al paciente mordido”.
Tarchinale asimismo explicó que “ya me ocupé de mandar estas planillas a Reta, a las Unidades Sanitarias de todas las localidades y a los CAPS con la información necesaria para seguir el protocolo”.
El trámite
También enumeró los pasos que hay que seguir para obtener la vacuna del Centro de Zoonosis de Avellaneda. “Hay que entregarle la planilla a un comisionista que debe llevarla a Avellanera -que nos queda a trasmano- a buscar la dosis y allá con esa documentación en mano evalúan si corresponde -o no- la vacunación. Recién entonces te dan las dosis necesarias para ese paciente. Todo esto es muy complicado, pero es el único centro que encontré que tiene en este momento que las recibieron ayer. Esperamos envíen a Región (Sanitaria) para poder buscarlas más cerca por lo menos”.
Prevención
“La prevención más gruesa en tema de rabia es que nuestras mascotas estén vacunadas. De las vacunas animales no hubo problemas hay stock a nivel privado o público, el faltante es en la vacuna para humanos. Hoy no hay ningún justificativo para que los animales no estén vacunados.
Tampoco tienen que andar los perros sueltos en la calle por su propia seguridad y porque también pueden lastimar o morder a alguien”, destacó Tarchinale.
Tampoco tienen que andar los perros sueltos en la calle por su propia seguridad y porque también pueden lastimar o morder a alguien”, destacó Tarchinale.
Asimismo aclaró que no es una zona endémica para la rabia y que hace más de 30 años no hay casos.
Tarchinale apeló al sentido común del dueño del perro que mordió a Tiago de 8 años, en Reta, y dijo que conociendo la situación del animal se evitaría que el pequeño sea vacunado con 9 dosis de la Fuenzalida-Palacios, 7 seguidas más un refuerzo a los 10 días y otra a los 20 días.
Tarchinale apeló al sentido común del dueño del perro que mordió a Tiago de 8 años, en Reta, y dijo que conociendo la situación del animal se evitaría que el pequeño sea vacunado con 9 dosis de la Fuenzalida-Palacios, 7 seguidas más un refuerzo a los 10 días y otra a los 20 días.
“Es una serie de complicaciones para el nenito que encima que soporta su mordedura tiene que recibir todas estas dosis de vacunas”, finalizó.
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