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El comisario Carlos Ignacio Degiorgi recibió a LA VOZ DEL PUEBLO y habló del nuevo desafío que significa ser la máxima autoridad del distrito en materia de seguridad. Su perfil y prioridades. Minoridad, estafas, respeto por la investidura y burocracia policial
Texto y fotos: Enrique Mendiberri
El comisario Carlos Ignacio Degiorgi se transformó el lunes en el nuevo jefe de la Policía Comunal. Un cargo al que estuvo cerca de acceder años atrás, pero una serie de diferencias se lo impidieron.
Hoy, con 41 años, es tal vez una de las autoridades más jóvenes que tiene el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires entre sus filas y puede aplicar su experiencia a pocos kilómetros de Adolfo Gonzales Chaves, su propia tierra y el lugar elegido para cuidar también a su familia, sin despegar la mirada de Tres Arroyos y sus variadas necesidades en una materia tan sensible como la seguridad.
LVP: ¿En qué nivel de la carrera de policía ubica el nombramiento que acaba de recibir?
Ignacio Degiorgi: “Es uno de los principales objetivos en la carrera de un policía, ya que tenés un distrito a cargo. Después hay otras metas, pero que son mucho más elevadas. Se ha reducido a cantidad de lugares en la cúpula policial para altas jerarquías. Entonces, una vez que se llega a la Policía Comunal y de Tres Arroyos, que es una de las más complejas de la zona, luego recalarás en alguna otra Distrital o Comunal, esperando a ver si logramos el pase a un lugar que tenga la jerarquía para aspirar a ser Comisario Mayor”
LVP: ¿Cómo observa el respeto hacia la investidura policial en las calles de Tres Arroyos?
ID: “En la mayoría de la ciudadanía, el respeto está. En otros lados está más difícil, pero Tres Arroyos todavía es una ciudad con buenos principios y educación en la casa, por lo que en la mayoría de los habitantes el respeto está. No obstante, vemos que cierta parte de la sociedad tiene eso, pero para trabajar sobre esa situación, el Municipio está abordando el tema desde distintas aristas para tratar de revertir esa situación.
LVP: ¿Es correcto decir entonces que Tres Arroyos aún está “chapado a la antigua”?
ID: Si, el respeto a los ciudadanos mayores, el saludo en las calles, se nota. Obviamente, notamos la presencia de ciertas personas que se creen rebeldes, pero son controlables. Ese es un trabajo mancomunado y de todos”.
LVP: Luego de hechos resonantes de las últimas semanas ¿Es la minoridad uno de los problemas que más atención requiere en Tres Arroyos por estos días?
ID: “La minoridad es uno de los problemas. Hay varios problemas que atañen a esta actividad, ya que tenemos una mutación del delito que es compleja. Cosas que no se veían en Tres Arroyos están sucediendo, otras que la policía trabajaba de una manera, ahora hay que abordarla de otra. El tema menores es algo muy complejo y en lo que no solo está ocupada la policía, sino también el municipio”.
LVP: ¿De qué manera?
ID: “El municipio puso a disposición de todos el Centro de Minoridad. Cualquier menor que es derivado a una dependencia por alguna situación o delito, de forma inmediata es abordado por el Gabinete de Minoridad. Antes, la fuerza policial aprehendía, restituía a los progenitores y después tomaba intervención minoridad. Ahora, es una intervención directa. Cuando el menor ingresa a la Comisaría, tiene la asistencia del progenitor y el acompañamiento del Centro de Minoridad que lo acompaña en toda la transición”.
LVP: ¿En qué consiste el acompañamiento?
ID: “Primero es el resguardo del menor y después ir evaluando al menor para saber por qué llegó a esa situación y después hacer un abordaje completo”.
LVP: ¿Eso implica algún traslado de responsabilidades a los padres?
ID: “El traslado de responsabilidad a los padres está desde el mismo momento en que se le restituye el menor a sus padres. Esto implica que tiene una responsabilidad sobre ese menor y el resguardo para que, cuando salga de la comisaría no vuelva a delinquir. Pero en ese acompañamiento, cuando se comprueba que los padres necesitan apoyo, ahí interviene Minoridad”.
LVP: ¿Cómo es ese apoyo en caso de necesitarlo?
ID: “Al ser menores de edad, solamente es abordando para ayudarlo a salir de esas situaciones. Para eso tenés lo que formula la policía al aprehenderlo, tenés lo que transmite el menor adentro de la comisaría y tenés lo que te informa la familia en ese momento. De todo eso, surge el abordaje. Policía no puede incidir sobre menores, salvo que lo disponga una orden judicial. Entonces esa incidencia para tratar de trabajar y formar nuevas normas de conducta para con el menor, lo hace Minoridad. Una de las más cotidianas tiene que ver con la inclusión a la actividad educativa. Muchas veces desisten de continuar con su educación primaria o secundaria y Minoridad interviene para que vayan al colegio. Hacen controles de asistencia y demás”.
LVP: ¿Qué pasa cuándo son hijos de personas con antecedentes penales y hay claro desinterés por lo que pase con los menores?
ID: “Esa es una de las razones por las que se decidió tener el Centro de Minoridad. Muchas veces venía el padre, sacaba al menor de la Comisaría y salía uno para cada lado. El menor seguía sin la tutela y volvió a delinquir, porque ‘como entró salió’, entonces es minoridad la encargada de hacer ese seguimiento”.
LVP: ¿Y si falla el seguimiento?
ID: “Primero se articula con la Fiscalía de Minoridad, que puede desprender causa para con los progenitores. La consecuencia para ellos puede llegar, pero el principio de la causa, es el abordaje del menor a través de la asistencia”.
LVP: ¿Nota que los menores son conscientes de la impunidad que otorga la minoridad y se abusan?
ID: “No sé si la cancherean, pero el conocimiento de la situación y de las normas que se le aplican existe”.
LVP: ¿El resto de la mutación delictiva que mencionó arriba hacia donde va?
ID: “Hay mucho delito electrónico. Lamentablemente por más que se haga difusión sigue suscitándose”
LVP: ¿Coincide en que tanta difusión del tema haya impactado de manera negativa en el objetivo de mantener atenta a las personas mayores?
ID: “Te agarran en un momento que no tenés todos los sentidos alineados y caes. Los famosos Cuento del Tío son las nuevas modalidades, antes ingresaban con violencia y hoy juegan con esa forma delictual y llegan a concretarlo. Muchas veces son identificados cuando van a buscar el delito. Pero antes, si uno cometía un asalto afrontaba una pena muy alta y ahora, a sabiendas de que una estafa es un delito excarcelable, la pena es más baja y saben que tienen más chances de salir que con un artilugio real”
LVP: ¿Y el consumo y venta de drogas lleva a generar situaciones delictivas en Tres Arroyos?
ID: “El consumo es la principal razón que adhiere a la formación de una causa. Porque las personas que consumen y que después se sienten mal o que la familia detecta el consumo elevado, son las que dan el puntapié para el inicio de las causas penales”.
LVP: ¿Qué hace la policía ante la denuncia de un familiar con problemas de drogas?
ID: “En principio se la aisla en Salud Mental por un lapso de tiempo, para hacerle un control , como una desintoxicación. Es en ese momento cuando se empiezan a trabajar las causas penales. Muchas veces, como son solamente asistenciales, o sea sin comercialización, no se genera la causa penal. Pero otras sí, y de ahí se van desprendiendo investigaciones”
LVP: ¿Qué le va a bajar como línea de trabajo a su gente?
ID: “Primero, una línea clara, trabajo y compromiso con la sociedad. Tenemos que estar a la altura de las circunstancias y atender a la sociedad porque si concurre a una dependencia policial es porque tiene un problema”
LVP: Hay mucha gente que se queja de las demoras que se viven en la comisaría al hacer una denuncia. ¿Qué le diría a esa gente?
ID: “Que estamos tratando de mejorar esa situación, ya que la atención y el formalismo que nos requieren para la radiación de una denuncia es complejo, lleva una serie de pasos que exige el propio sistema para generar la denuncia y eso genera la demanda de tiempo por la que les pedimos las disculpas del caso”.
Perfil y experiencia
Comisario Carlos Ignacio Degiorgi
Edad: 41
Estado civil: casado hace 10 años con Mariana Mariani (también de Adolfo Gonzales Chaves)
Hijos: 2, Ignacio (21) –estudiante de la carrera de veterinaria en Tandil- y Tomás (7)
Carrera: 23 años de servicio. Iniciada en Necochea. Siguió en Bahía Blanca y Adolfo Gonzales Chaves, antes de trasladarse a Tres Arroyos, donde fue oficial de servicio en la Comisaría Primera (2003). Previamente en las delegaciones distritales trabajó en Orense y Claromecó. También en el CPR (cuando era Patrulla Rural), donde recaló como titular en Orense y también fue segundo jefe en Adolfo Gonzales Chaves. Hace 3 años volvió a seguridad Tres Arroyos
