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A la trágica noche del sábado que vivió Olavarría, en la que durante un descontrolado recital del Indio Solari fallecieron dos personas, le siguió un domingo con incidentes y caos general y con una ciudad todavía colapsada. Disturbios y enfrentamientos entre fanáticos y la policía en los alrededores de la terminal de ómnibus, gente sin plata ni pasaje de regreso a sus casas cargada como ganado en camiones municipales, la ruta congestionada durante gran parte de la jornada, y dos de los 12 heridos que aún quedan en el hospital municipal, internados en terapia intensiva (una mujer en estado crítico por intoxicación).
Desbordado
Si bien el predio donde se hizo el recital estaba preparado para recibir hasta 200 mil personas, la fiscal de turno Susana Alonso indicó que hubo al menos 300 mil asistentes, por lo que ahora se deberá establecer quiénes son los responsables de la situación.
El Indio Solari, que ayer declaró ante la fiscal aunque en calidad de testigo (ver: «El Indio…»), dio el sábado a la noche un show que en el Predio Rural La Colmena, que interrumpió en diversas oportunidades por los desmanes que provocó el público. «Son siete tipos que están rompiendo las pelotas. Alguien tiene que ir a sacar a estos boludos», dijo el artista a los pocos minutos de comenzado el espectáculo sobre un grupo de personas que, visiblemente alcoholizados, se encontraban apretados contra las vallas de seguridad, con serio riesgo de ser lastimados.
Al ver que la situación no mejoraba, Solari solicitó que prendan las luces en el lugar y reclamó por la presencia de Defensa Civil, que contó con carpas al costado del lugar. Incluso intercambió algún que otro insulto con sus fanáticos y, tras intentar retomar con su presentación, decidió frenar hasta que no se solucionaran los problemas en los primeros metros del predio.
«El Hospital estaba preparado y no fue colapsado. Había un operativo de Salud muy importante para asistir a la gente. Pero las víctimas habrían muerto adentro del predio, los habrían sacado sin vida», dijo Alonso en declaraciones a la prensa.
El secretario de Salud de Olavarría, Germán Maroni, precisó que uno de los dos fallecidos fue identificado como Javier León, de 40 años, mientras que el segundo no contaba con documentación e incluso estaba semidesnudo cuando fue sacado del predio del recital.
Varados
Alrededor de 20.000 personas procedentes del conurbano bonaerense seguían en la tarde del domingo varadas en Olavarría. En declaraciones a Télam, el comandante del destacamento de Bomberos de Olavarría Julio Colman, dijo que aún «quedaron adentro de lo que es el casco urbano, unas 20.000 personas dando vueltas con algunos disturbios, más que todo la gente que está parada acá y quiere irse, la mayoría, gente del Gran Buenos Aires».
Según explicó Colman «los disturbios comenzaron cuando no encontraron forma de irse del lugar. Realizaron disturbios por la mañana y ahí se está tratando de ver cómo se puede solucionar, con micros o con algún tren. Estas personas tenían cómo llegar pero no como volverse. Prendieron fuego en la zona de la terminal de ómnibus en una oficinas que se habían dispuesto para el canje de las entradas, unas oficinas portátiles. En esa zona, que es zona del tren hicieron piquetes, quemaron gomas, maderas y también saquearon algunos comercios», dijo.
Ganado
Para descongestionar la zona de la terminal, el municipio puso camiones y colectivos, que fueron aportados por intendencias y por el Ejército, trasladaron a cientos de jóvenes que habían quedado a la espera de regresar a sus casas tras el recital.
«A la mayoría de la gente los dejó los micros», explicó el secretario de Economía municipal, Gastón Acosta, añadiendo que «intendentes vecinos y desde el Ejército» se aportaron micros para trasladar al público fuera de la ciudad.
Había personas que estaban incentivando a los demás a la violencia y «tratamos de descomprimir el lugar y pusimos los camiones que juntaban la basura» para los traslados, explicó el funcionario al justificar esa particular forma de viaje, y agregó que los traslados en este tipo de vehículos se hicieron para «que puedan retirarse de la ciudad y hacer trasbordo con otro micro».
Ruta congestionada
La ruta 3, que conecta a las ciudades de Olavarría y Cañuelas, presentaba una gran congestión de tránsito, con cientos de micros, combis y automóviles particulares que trasladaban a miles de personas que en la noche del sábado asistieron al recital del Indio Solari.
«La ruta está en muy buen estado, pero no da abasto, está desbordada. Hoy, al tránsito habitual interurbano y de camiones hay que sumarle esta gran cantidad de vehículos. Por el recital hay cerca de 800 micros y combis, más motos, camionetas y autos particulares», dijo Ernesto Arriaga, responsable de prensa de Vialidad Nacional, a los periodistas.
Apuntó que además están colapsados todos los servicios de ruta relacionados con el traslado de la multitud que asistió al recital en el predio La Colmena. «En estaciones de servicio para cargar combustibles se registraban colas de una hora y media», comentó Arriaga. (Télam-DIB).
